Alegría y disgusto a partes iguales

Cinco puntos de renta sobre el quinto puesto cuando sólo quedan seis en juego. Esa es la ventaja con la que cuenta el Náxara después de vencer al Vianés ayer en un encuentro muy movido en el que los navarros desperdiciaron hasta tres ventajas en el marcador.

Fue un enfrentamiento en el que los dos equipos estuvieron mucho más acertados en el apartado ofensivo que en el defensivo. Y eso se apreció en el marcador final. Tras una gran parada de David ante un disparo de Lozano, el Vianés se adelantó en su primer ataque. Achi, que fue una tortura para la defensa visitante, recogió un pase de Jorge y abrió la contienda. La batalla, de guante blanco, continuó tras el tanto y una mano de David volvió a evitar que Javi Martínez empatara. Dos paradas del guardameta, que nada pudo hacer con el tercer ataque najerino. Lozano, con un tiro ajustado, puso el empate.

Con el viento jugando un papel fundamental, la igualdad se volvió a romper al filo del descanso con un disparo de Gabri tras un despeje de una defensa visitante demasiado blanda. El Vianés terminaba así con buen sabor de boca la primera mitad, pero comenzó la segunda con una mala noticia. David se tuvo que quedar en los vestuarios por lesión. Una baja muy importante.

Con esa ausencia y el tempranero gol de Nacho se podría pensar que los navarros se vendrían abajo, pero todavía le quedaban balas en la recámara. Achi volvió aprovechar la pasividad de la defensa blanquiazul para dar ventaja a los de Iñaki Santibáñez.

Cada vez quedaba menos tiempo para el final y el Náxara necesitaba reaccionar. Lo intentó, buscó poner a prueba a un Pardo que se mostró algo nervioso, pero que se lució ante un remate de Orodea, y logró el empate con un cabezazo de Arturo a la salida de un saque de esquina. La igualada parecía que iba a ser el resultado final, pero Orodea sacó petróleo de una jugada cuando el duelo estaba a punto de acabar y dejó los puntos en el bolsillo najerino.