«Venía con las expectativas muy altas y estoy encantado con mi decisión»

– ¿Qué tal están siendo estas primeras semanas en su nueva casa, en su nuevo club?

– Buenas. En proceso de adaptación, pero estoy encantado de estar aquí. Me he encontrado un gran club, un vestuario que me ha recibido de lujo y un proyecto que me atrae. También estaba bien en Melilla, pero llegó un momento en el que necesitaba un cambio. Entendí que era más atractivo pelear por un ascenso que por una permanencia.

– ¿Ha encontrado aquí lo que le dijeron que le esperaba?

– La verdad es que sí. Venía con las expectativas altas y no me ha defraudado nada de lo que me habían comentado. La ciudad deportiva, una afición increíble, un club y una ciudad en los que me siento como si estuviera en casa… Estoy muy contento.

– Jugó su primer partido como titular. ¿Cómo se sintió?

– Bien. Se me vio jugar donde lo hago habitualmente, cerca de los centrales, atento a las acciones del rival y buscando robar el balón. Fue un partido típico de 'play off', de esos en los que te juegas las patas. Acabé contento porque hicimos un gran partido, ganamos y, además, dejamos el 'goal average' a nuestro favor.

– ¿Pensaban en una victoria tan amplia?

– No. Sabíamos que debíamos ganar, pero no esperábamos un 4-0 tan claro.

– Firma por medio año, lo que representa una enorme aventura para un chaval de 21 años.

– Sí, así es. Estoy muy lejos de casa, pero con la expectativa que todos en este club tenemos y que no es otra cosa que ascender. Cuando lo logremos, ya valoraremos dónde merece estar cada uno. Personalmente, llevo poco tiempo aquí, pero la experiencia me está gustando tanto que puedo decir que estaría encantado de quedarme aquí más tiempo.

– Ha bajado de Primera a Segunda Federación, paso que no es fácil de dar. Supongo que tampoco debe ser fácil salir de una cantera como la del Betis.

– Yo tomé la decisión, porque me restaba un año más de contrato y decidí rescindirlo. Tenía la propuesta del Melilla, en Primera y quería probar. Cuando estás en un club como el Betis vives en una burbuja y piensas que puedes ser futbolista fácilmente. De repente, sales de ahí y chocas con la realidad porque el fútbol real es diferente. Tienes que trabajar mucho y nadie te va a regalar nada. En mi caso fui al Melilla, a una categoría superior, pero decidí venir a Logroño para luchar por un objetivo como es el del ascenso. Este cambio no significa para mi bajar un escalón en el mundo del fútbol. Además, vamos a subir. Estamos convencidos de ello y mi ilusión es tremenda en este sentido.

– ¿Qué le parece el fútbol de este grupo?

– Hay nivel. Es verdad que un equipo de Primera te puede hacer más daño, pero ésta es una categoría en la que hay muchos sueños que se desean cumplir y que es exigente. Ya jugué con el Betis en Segunda y aprendí que cualquier equipo te puede complicar un encuentro. Siempre se ha dicho que el fútbol del norte es más de barro, más robusto, mientras que el del sur es más de toque. Globalizar no es bueno, pero lo que veo en la UD Logroñés es mucha calidad, hay ambición, hay garra… Contamos con grandes historiales personales y lo que hacemos es coger lo mejor de cada uno de nosotros para complementarnos. Aquí no hay que establecer diferencias, sino tener claro que remamos todos en el mismo sentido.

– ¿Su único objetivo personal es ser futbolista?

– Desde pequeño he soñado con ser futbolista. Ahora bien, siempre hay que tener un plan B y avanzar en la vida más allá del fútbol. La vida del jugador es muy golosa, aunque no siempre, y muy corta. Lucharé por ser futbolista, pero siempre formándome. Me quedan dos años para acabar Ciencias del Deporte y un año de Nutrición, un grado superior.