La Segunda Federación se le atraganta a los riojanos

Nadie dijo que llegar y, sobre todo, saber mantenerse dentro del cuarto nivel del fútbol nacional iba a ser sencillo. Si no que se lo digan a los cuatro equipos que militan esta temporada en la Segunda Federación. Al menos si hablamos de la primera vuelta en la que Racing Rioja, UD Logroñés B, Alfaro y Arnedo ocupan cuatro de las cinco plazas de descenso.

En el caso del Racing Rioja, su experiencia dentro de la categoría le ha servido de lastre. Un peso que le ha hecho caer hasta la zona más peligrosa de la clasificación. Y es que, poco o nada se parece este equipo al que hace justo año lideraba en solitario un competitivo Grupo Norte. Ha cambiado su cuerpo técnico, dos veces este curso, al igual que la gran mayoría de su plantilla. Apenas quedan cinco jugadores de ese equipo que aspiraba a todo y que este curso aún no ha conseguido nada, cayendo incluso en la primera eliminatoria de la Copa del Rey.

Como viene siendo habitual dentro del conjunto racinguista, el mercado estival sirvió para conformar una competitiva plantilla con experimentados jugadores de categorías superiores que no terminaron de encajar del todo. Al igual que su banquillo en el que en apenas cuatro meses han pasado tres hombres: Iván Agustín, Nacho Martín y Jonatan Di Giosa, el actual técnico. Parece que la irrupción de este joven preparador ha sido el revulsivo que le faltaba a un Racing Rioja que, pese a ocupar la decimosexta plaza, hilvana dos jornadas sumando.

No tienen mejor suerte sus vecinos del Mundial'82. Al igual que los racinguistas, la UD Logroñés B también está viendo peligrar su lugar dentro de la categoría a pesar de ser el representante riojanos que ha amasado una dinámica más estable. Esa estabilidad ha podido extrapolarse también dentro de los vestuarios con la continuidad de gran parte del proyecto que logró la permanencia con Parri a los mandos.

Se estrenó con derrota ante el Arnedo (3-1) pero también goleó a colosos de la talla del Arenas de Getxo (5-1) en una primera vuelta en la que ha ganado seis partidos, ha empatado dos y ha perdido nueve. Su último choque fue ante el Brea en el que el Promesas volvió a la senda correcta situándose a un único punto del equipo que marca la salvación.

Mientras que al Racing Rioja y a la UD Logroñés B su experiencia dentro de Segunda Federación no les ha valido de mucho, Alfaro y Arnedo han pagado estos meses las consecuencias de ser los novatos aunque no por ello significa que no hayan podido vivir en sus carnes la fortuna de estar, en algún momento dentro de esta primera vuelta, dentro de los lugares hegemónicos.

El arranque de los blanquillos fue bueno consiguiendo imponerse a equipos como el Tudelano o la UD Logroñés B pero a medida que fueron pasando las jornadas el proyecto fue desmembrándose llegando a ser colista de durante cinco semanas. Esta complicada situación propició la salida del entrenador que consiguió el ascenso, Israel Villarreal, que pasaba el testigo al exjugador navarro que militó en el club alfareño, Jorge Sola.

Sola se estrenó con victoria ante un Arnedo (2-1) que ha probado la miel y la hiel de esta categoría. Empezó ocupando el primer puesto de la tabla al ganar y golear a la UD Logroñés B pero termina la primera vuelta siendo el colista de la misma.

Alberto Eguizábal sigue al mando del conjunto arnedano aunque no resultaría raro que, si los resultados no empezasen a llegar, haya movimientos en el banquillo tal y como ha ocurrido con sus compañeros. Más aún viendo que el Arnedo lleva casi el triple de derrotas que de victorias. Toca trabajar duro para una segunda vuelta en la que todo está en juego.

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