El varapalo del descenso se convirtió en el punto de inflexión de una SD Logroñés que cambió de piel casi por completo durante este verano para hacer que su estancia en Segunda Federación fuera lo más corta posible. Desde entonces, todas las decisiones tomadas en ... el seno de la entidad han ido exclusivamente para ese fin, para materializar la ambición mostrada ante los micrófonos en un arranque liguero de sobresaliente.
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El vestuario blanquirrojo ha respondido con creces a las expectativas puestas sobre él al sumar diez puntos de los doce que se han puesto en juego. O lo que es lo mismo: se mantiene invicto al ganar al Calahorra (1-4), Arenas de Guecho (2-1) y al Anguiano (0-1), y con el empate contra el Teruel (1-1). Unos datos que ilusionan tanto en el césped como en la grada y que permiten que el conjunto capitalino se acostumbre a mirar desde las alturas al resto de equipos que conforman la categoría.
Ante esto, Carlos Pouso se muestra contento y reafirma su hoja de ruta. Después de ganar en Isla, en un partido difícil que se terminó resolviendo con un gol en propia puerta de los serranos, siguió defendiendo las virtudes de contar con una plantilla corta. «Estoy muy tranquilo porque el equipo trabaja muy bien; no solo en los partidos sino que es una gozada verlos en los entrenamientos», aseguró el técnico. El equipo guarda reposo hasta mañana para recargar pilas antes de verse con el Barbastro.
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