Un inoperante Racing Rioja no puede superar al Laredo en casa

Ayer empataron sin goles ante un Laredo en la parte baja de la tabla y la pasada jornada cayeron contra un Tropezón (2-1) en penúltima posición. El buen colchón de puntos de la primera vuelta permite que el conjunto logroñés siga dentro de los puestos de promoción, pero si las cosas no cambian, puede que los racinguistas tengan que terminar la temporada antes de lo que todo el mundo, tanto fuera como dentro de la plantilla, se imaginaba.

El Laredo, pese a jugar a domicilio, se sintió ayer en como en casa. El club fletó tres autobuses repletos de una afición que apoyó a su equipo de principio a fin. El equipo les brindó unos primeros compases de intensidad, de toque de balón y de intentos en el interior del área. Muestra de ello fue la jugada con la que daba inicio el partido en la que Vinatea estuvo a punto de materializar un gran balón de Peredo que lanzó desde el centro del campo. Lo intentaron por las bandas y por el interior, jugadas en su mayoría firmadas por Iván, pero la zaga racinguista hizo su trabajo frenando los envites de los cántabros.

Hubo que esperar un poco más para ver a una ofensiva riojana a la que en todo momento le faltó apoyo arriba. Buscó el gol el Racing Rioja con una jugada por la banda derecha de Manu Calvo, que rascó un córner. En él, Santamaría remató por encima del travesaño. Pero la gran ocasión del encuentro llegó antes del final del primer tiempo con un balón colgado al área que terminó rematando Xabi Barace, desde el segundo palo, a la madera.

Los racinguistas arrastraron sus errores a la segunda parte. Manu Calvo, como punta, se quedaba solo mientras el centro del campo estaba lleno de jugadores locales. Los logroñeses no dejaron pasar al Laredo pero tampoco llegaban a hilvanar jugadas con peligro. Es más, no aprovecharon ni la superioridad numérica tras la expulsión de Andrés, que recibió la cartulina roja directa tras una fea entrada sobre Adri Carrión.