La SD Gernika frena al Calahorra

La SD Gernika estuvo seria, supo mantener la ventaja en el marcador a pesar de tener un jugador menos desde el minuto 62 y frenó el empuje de un Calahorra carente de efectividad.

El partido tuvo una llegada clara a la portería contraria por parte de los dos equipos nada más comenzar el encuentro. El Calahorra intentaba avanzar hasta la portería rival con jugadas por la banda y el Gernika probó sorprender a los locales con pases largos.

Los rojillos no tuvieron ayer su día. Les faltó precisión y cometieron numerosos errores en los pases durante todo el partido. Además de tener constantes pérdidas de balón en las disputas y rechaces. En ataque no llegaron a rematar la faena. Pusieron velocidad e intensidad, pero se confundieron en el área de la portería defendida por Altamira, que no hizo concesión alguna.

El equipo visitante tampoco estuvo fino en los pases y a la hora de materializar los ataques y el capitán Miguel, que volvió a ocupar la titularidad en el Calahorra, se mostró firme entre los tres palos y con el pie, porque los defensores se apoyaron en él en varios lances del partido. En el minuto 28, Carlos le quiso sorprender desde la mitad del campo al verle adelantado, pero Miguel no tuvo problema en atrapar la pelota.

Conforme avanzó la primera mitad, los rojillos intentaron dar un paso adelante e incluso probaron a disparar de lejos.

Al regresar del descanso la situación no cambió aunque los visitantes parecían ir a más. Después de los primeros cambios en ambos equipos se produjo el momento que cambió el rumbo del encuentro. En el minuto 59,Iker, que acaba de salir al terreno de juego, se marchó con el balón directo a la portería de Altamira, con un defensor que le agarró durante varios metros.

Al parecer, el colegiado aplicó la ley de la ventaja, pero la situación provocó que el delantero rojillo llegase forzado y el disparo salió fuera. La afición y los jugadores locales reclamaron tarjeta roja para el defensor. No hubo nada por parte del árbitro.

En la siguiente jugada, Gallastegui, que había entrado al campo poco antes, logró marcar el único gol del encuentro.

Parecía que la cosa podía cambiar cuando el colegiado expulsó a Aitor Ortega al amonestarle con la segunda tarjeta amarilla en el minuto 62. Quedaba mucho tiempo por delante, aunque no fue suficiente para variar el marcador. El Calahorra se volcó en ataque sin intimidar a Altamira. No dio con la tecla el equipo rojillo e incluso pudo haber encajado más goles en la recta final, sobre todo en una buena ocasión de Mikel.