Ganar en Gobela y pasar página

«Gobela es complicado», admite Zubiri, que conoce este campo. Siempre le han otorgado un aspecto fiero, pero una vez lo visitas ya no resulta tan agresivo. El Calahorra se encontrará con un terreno de juego con césped artificial nuevo, pero con las mismas dimensiones de siempre y con los muros perimetrales vistiéndose con los colores locales. En ese escenario en el que el conjunto rojillo ganó por la mínima en enero la incógnita es saber cómo responderá el Calahorra no solo al rival, sino al varapalo que sufrió el domingo en La Planilla.

«Al inicio de la semana estábamos hundidos, pero con el paso de los días pensamos más en este encuentro. Contamos con una buena plantilla, capaz de adaptarse a diferentes situaciones de partido y sabemos que en Gobela no debemos cometer errores y tenemos que aprovechar las ocasiones que tengamos para marcar», admite Zubiri.

El Arenas se estrena en casa después de la contundente derrota con la que regresó de Teruel el pasado fin de semana (3-0). El club de Gobela ha mutado respecto a las últimas campañas. Ha llegado Ibai Gómez a su banquillo con una propuesta de más posesión y toque, cuando el recinto de Las Arenas siempre ha apelado al juego directo y a la estrategia. Todo suma. Gómez inicia esta experiencia después de un buen año en el Santutxu juvenil y de su experiencia en París, al frente de República Dominicana.

«Tenemos una idea de Gobela, pero este Arenas juega bien al fútbol. Es bonito de ver», dice desde el otro banquillo Íñigo Valencia. Tendrá que hilar fino el técnico navarro. «Nos miramos a la cara y asumimos que no habíamos hecho un buen partido», admitía ayer. En principio puede elegir entre sus hombres, pero deberá hacerlo bien. El pasado domingo su equipo cometió muchos errores y lo pagó con un 1-4 que escuece. Gobela también castiga el error y es un campo en el que es muy complicado cambiar un marcador adverso. La gran ventaja que ofrece es que si marcas primero tienes un alto porcentaje de opciones de vencer. Ambos buscan lo mismo para intentar cerrar la herida abierta en Calahorra y Teruel, respectivamente.