El Alavés B toma La Salera

El guion de Josean García para este choque, el primero de la temporada, estaba claro. Defender y presionar intentando aprovechar los contragolpes. Orodea estaba solo como punta mientras el resto de sus compañeros bajaban las líneas con el objetivo de no dejar huecos. No se consiguió del todo ya que los alaveses, que fueron los que vistieron la elástica albiazul sorprendiendo a las gradas, insistieron por las bandas con De León en la izquierda y Mariano por la derecha.

Las ocasiones de los albiazules no solo llegaban por los costados sino que también lo hacían desde la lejanía con un balón raso de Pérez que recorrió varios metros hasta las manoplas de Pradas. Tocaron poco la pelota los najerinos en los primeros compases del partido y cuando lo hicieron perdían la posesión con facilidad. Nervios y precipitación. Una combinación no muy certera ante un rival que apenas daba descanso. Probaron de cabeza con un remate de Moira al igual que desde fuera del área con un chut de Mendes que se fue por encima de la escuadra.

El encuentro se fue agitando con multitud de faltas por ambos lados cuando el Náxara empezaba a animarse. Orodea quería desmarcarse pero, aún consiguiéndolo, le falto un apoyo con el que poder terminar las jugadas. No había peligro por su parte pero, al menos, lo alaveses no habían conseguido adelantarse.

La segunda parte comenzó como terminó la primera, con ocasiones del lado rival. Keller probó suerte de cabeza antes de que Parada lanzase un libre directo desde fuera del área tras una falta obligando a Pradas a despejar bajo los palos.

El Náxara también aprovechó el balón parado para tantear la puerta contraria con varios saques de esquina consecutivos. En el segundo, lanzado por Rojo, Juan consiguió rematar de cabeza pero el balón se perdió por línea de fondo por poco. Y, cuando más peligro estaban generando los pupilos de Josean García, los alaveses abrieron el marcador con un potente disparo cruzado de Mariano que se hundió en las mallas después de rebotar en el segundo palo. La resistencia en La Salera había durado 70 minutos.

El entrenador riojano empezó a mover su vestuario dando esa garra que tanto se había echado de menos minutos atrás. Entró Aday, Aitor Lorá y Diego Parrado, quien dio una gran velocidad al equipo. Es más, fue el protagonista de una de las últimas incursiones del partido, ya fuera del tiempo reglamentario. Encaró a puerta y con rapidez fue cruzando el centro del campo hasta que Keller interrumpió su carrera con una fea falta que le hizo ver su segunda cartulina amarilla. El jugador aprovechó el libre directo pero Rodríguez no falló haciendo que el Náxara cayera con la cabeza alta ante un gran rival.