El Haro no concreta su superioridad

El Haro debió llevarse los tres puntos, porque tuvo más opciones de gol, desactivando al rival de tal manera que el portero Fermín apenas tuvo que estirarse en toda la tarde. A los dos minutos, mostraron sus intenciones los visitantes en una doble ocasión de gol, primero de Vesiaho en un libre directo que desvió Mediavilla, y luego, en la continuación de la jugada, con un remate de Iván Garrido que sacó como pudo bajo los palos entre una maraña de defensores. La doble oportunidad inicial espoleó al Haro, que mostró su decisión de salir a por los puntos.

Luego, con el paso de los minutos, matizó esa ambición, pero la puesta de largo resultó codiciosa, haciendo gala de una presión alta que dificultó mucho las cosas a los zagueros del Portugalete, octavo clasificado del Subgrupo 2A, que no tuvo capacidad para manejar la pelota y juntar pases. El Haro volvió a acercarse al gol cuando, a los 14 minutos, nuevamente Vesiaho preparó la mirilla y su lanzamiento lejano se fue cerca del palo después de tocar en un defensor. La excelente pegada del finlandés en las acciones a balón parado causó más de un quebradero de cabeza al Portugalete, que, con el paso de los minutos, se sacudió el dominio, encontró vías de suministro hacia Thaylor y Mario Musy, y pudo aliviarse.

Metieron miedo un par de galopadas del local Thaylor, sustituido y enfadado por dejar el partido a más de un cuarto de hora para la conclusión. El duelo derivó, con el paso de los minutos, hacia un trasteo que perjudicó las ambiciones del único equipo que salió en disposición de llevarse el partido, el Haro. Iván Garrido, posteriormente relevado por Manjón, pudo marcar casi al filo del descanso, pero el portero Mediavilla, atento y concentrado de principio a fin, lo evitó con otra felina estirada. Fue la última ocasión clara del encuentro, pues, en la segunda parte, todo se trabó en un duelo de gran exigencia física.

Joseba relevó a Borja García en el intermedio. Otro libre directo de Vesiaho y algún centro sin rematador representaron el bagaje ofensivo del Haro tras el descanso. Tampoco fue capaz de activar a Mikel Bueno, que se cansó de bajar pelotas y ofrecerse en apoyos, pero al que no le llegaron balones en posiciones de remate. El Portugalete se mostró incapaz de profundizar y estuvo maniatado por la solvencia del Haro, al que ni siquiera desbordó cuando quiso recurrir a los balones en largo. El empate fue demasiado premio para los locales y muy poco para el Haro. La vistosidad del partido no estuvo a la altura del esfuerzo de los jugadores. Muchos cayeron exhaustos a la conclusión.

Con Aitor Calle sancionado, Keku Urzanqui fue el encargado de asumir el rol de primer entrenador en el estreno del conjunto harense en la fase por la permanencia. El punto dejó «un sabor agridulce» por la superioridad en el primer periodo. «Hemos tenido muy buenas ocasiones para irnos por delante al descanso.

No hemos conseguido materializar», asumió el preparador, reconociendo el bajón en el segundo tiempo «en el que ha habido muy pocas ocasiones». Rescató las «buenas sensaciones» por el «espíritu de orgullo» mostrado por el equipo. «Este es el Haro que queríamos ver», añadió.