La UD Logroñés se aferra a la esperanza del cambio

La cita es en Las Gaunas (19.00 horas). No todo es nuevo, pero sí que la UD Logroñés presenta novedades suficientes como para atraer al aficionado a la grada. Ayer mismo, los más tardíos hacían fila en las oficinas blanquirrojas para retirar su pase de temporada. El rival también es novedoso, el Leoia vasco. Localidad y club que conoce muy bien Carlos Pouso. Y es que este año han desaparecido gallegos y castellanoleoneses para abrir las puertas a vascos y castellanomanchegos, con el atractivo de ver fútbol madrileño en Las Gaunas. Es el placer por lo desconocido, pero también el riesgo. ¿Qué tiene más fuerza?

Riojanos y vizcaínos parten de la misma línea de salida, pero sus metas son diferentes. Sobre el césped de Las Gaunas se verá a dos equipos remodelados a lo largo de año, en el que apenas siguen una decena de jugadores del pasado ejercicio. «El 21 de septiembre estaremos mejor que este domingo», decía Carlos Pouso el viernes. Necesitan tiempo, aunque tiempo es lo que da la pretemporada. Tiempo, no resultados.

Si los blanquirrojos aspiran al ascenso, el Leoia desea la permanencia. Vive su tercera temporada consecutiva en la categoría y su reto es más modesto, pero igual de importante. «¿Tenemos más presupuesto que el Leioa? Sí ¿Les vamos a aplastar en el campo? No. Los presupuestos se quedan fuera del césped. No me gusta hablar de ventajas y desventajas según sea el presupuesto. No vamos a ganar a nadie por tener más dinero, mejor coche o mejor novia que el rival», advertía Pouso a pocas horas del partido. El mensaje es muy claro.

La UD Logroñés se ha medido esta campaña a conjuntos como el Zamudio o el Gernika. Y además, jugando como visitante. Ha salido airoso de los mismos y los blanquirrojos han visto cómo se las gastan en los campos vascos, aunque muchos de los pupilos de Pouso ya han pasado por esa experiencia. «Es verdad que los conjuntos vascos compiten muy bien; diferente es que se toque más o menos el balón», dice el míster. Se toca menos, hay más acciones para los más listos y la entrega, pelea y coraje son imprescindibles. Partidos de fuerza.

El escenario y el guión del rival son visibles, falta ver cuál será la oferta de la UD Logroñés. Carlos Pouso confía en que su equipo juegue mejor que la pasada campaña y anhela ganar más partidos en Las Gaunas que lejos de ella para sacarse esa espinita que se le clavó el pasado año, pero en el fondo esas estadísticas serán secundarias si se asciende un peldaño. «No he visto jugar al Leioa en pretemporada, pero tengo claro que viene a Logroño a ganar el partido», incide Pouso.

¿Y la UD Logroñés? Si las caras nuevas son más atractivas, el equipo lo es. Y mucho. El once que saltará esta tarde al césped (a falta de confirmación oficial) sólo da cobijo a cuatro jugadores de la pasada campaña: Miguel Martínez, Jaime Paredes, Adrián León y Antxon Muneta. Los otros siete se incluyen dentro del amplio paquete de futbolistas que ha llegado este verano a Las Gaunas.

Así, la zaga se completará con la polivalencia de Amelibia en el lateral derecho y la experiencia de Caneda y la fortaleza de Pazó en el centro de la zaga; la medular se completará con Thaylor y Pablo Espina por las bandas derecha e izquierda, respectivamente, y con Javi Rey escorado como nexo entre Adrián León y Thaylor. Queda la punta, esa figura que tantos quebraderos de cabeza ha dado a la UDL desde la marcha de Diego Cervero. Mendi será titular. Sobre su juventud recae la responsabilidad del gol. Juanfran se entrenó ayer, pero aún no tiene el ritmo del resto. Deberá esperar a la segunda jornada de Liga, como mínimo, para debutar.

Así, en este horizonte todo es incertidumbre. La UD Logroñés disfruta de una plantilla mejor y más amplia que la de la pasada campaña. Pocas dudas arroja su sistema defensivo; y esperanza es lo que se quiere visualizar en ataque. Acabar, por fin, con ese mal. Quizá mejor no hablar de él, como del ascenso, y dejarlo caer en el olvido. La suerte está echada. Esa es la realidad. No hay vuelta atrás. El Leoia es el invitado de excepción del inicio del octavo proyecto. La UD Logroñés, la gran protagonista. Que gane el Óscar o no depende de ella. Tiene doce meses para trabajarse el mayor galardón al que puede aspirar hasta el 1 de julio del 2017.