

Secciones
Servicios
Destacamos
José Martínez Glera
Miércoles, 3 de agosto 2016, 10:29
Pablo Bobadilla (Nájera, 16/11/1996) se ha convertido en todo un veterano en la primera plantilla a pesar de sus 19 años. Trabajó el pasado ejercició a las órdenes de Carlos Pouso mientras peleaba por ascender a Tercera División con el Promesas. Incluso fue convocado en alguna ocasión con la primera plantilla. La campaña que acaba de comenzar es muy diferente. Seguirá con Pouso pero ahora jugará en Tercera, aunque aspire a hacerlo en Segunda B.
«Tenemos buen equipo», dice, aunque se acuerda de algunos ausentes. «No están Titi o Pere Milla, pero la plantilla es buena», repite. Bobadilla comenzó a jugar en el campo de El Cementerio de Nájera. «¿Por qué no hay un campo mejor? Buena pregunta», afirma. En el rectángulo de la carretera de Baños de Río Tobía aprendió lo que duelen las caídas. Hoy aterriza en césped, aunque sea artificial. Siempre defensa. Central, lateral o medio centro. «Alguna vez he jugado de delantero, pero porque íbamos perdiendo. Defensa, siempre defensa», sonríe.
Bobadilla liderá una amplia lista de aspirantes. Junto a él se entrenan Ricardos Osés, Mikel Guiral, Javi Arza, Fernando Arnedillo, Guillermo Cabrera y Sergio Benito. También se puede incluir en el grupo a Iván Garrido, pero éste no pertenece a la UD Logroñés. Así, este central espigado es de los más jóvenes, pero también de los más experimentados. Trabajó a las órdenes de Pouso la pasada campaña y repite en ésta. El técnico confía en el najerino, aunque esa sentimiento no significa que le vaya a dar minutos en Segunda B. El año pasado se sentó en el banquillo en más de una ocasión, aunque él recuerda el partido contra el Villarreal.
«No me queda el amargor de no haber jugado un minuto en la anterior temporada. Y tampoco es una espina clavada. Estuve con el equipo en algunos encuentros y ahora lo que queda es seguir trabajando para volver a pasar por esa situación. Si juegas, mejor. Lógico», admite.
Pablo Bobadilla emigró rápido. Atrás quedó su etapa en la Escuela de Fútbol de Nájera. Maletas y rumbo a San Sebastián. Allí pasó dos temporadas, pero no llegó a sentirse pleno. «Me fui muy joven. Con 14 años estaba en Zubieta», dice. De nuevo hizo las maletas y regresó a Nájera. «Jugué en el Comillas, en División de Honor. Luego fiché por la UD Logroñés. Y hasta la fecha», indica.
Sobre el césped, Bobadilla no da la sensación de ser un jugador contundente, pero sí gusta de salir con el balón. «He hablado con el míster y voy a empezar a trabajar en el gimnasio», apunta antes de recordar que la pretemporada siempre es «muy dura». «Entrenar y entrenar, pero también es cierto que te dan una oportunidad como ésta y hay que aprovecharla. Yo me siento muy integrado en el grupo, aunque la plantilla hay cambiado mucho. Mi sensación es que estoy aprendiendo mucho, sobre todo en el momento de tomar decisiones, de elegir qué hacer, de comportarme sobre el campo. Ahora mismo, veo a Caneda y es impresionante lo que hace. Y Pazó, lo mismo», añade.
Integrado en el primer equipo y llamado a ser uno de los jefes del filial. Todo es nuevo para ese grupo de chavales que entrena Javi Pineda. Fue superior en Regional, pero la historia cambia en Tercera. «Veo a un equipo muy joven, demasiado joven incluso para ser un filial. Debemos adaptarnos rápidamente o lo pasaremos mal», señala. Por ahora, tantó sus compañeros como él completarán los entrenamientos en el primer equipo con los del filial.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Favoritos de los suscriptores
Destacados
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.