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s.moreno laya
Domingo, 11 de octubre 2015, 00:07
Asterisco arriba y abajo. Ambos a pie de página, si esto no fuera una edición digital. Pero como la es, los asteriscos se sitúan en las áreas, donde la UD Logroñés ganó el partido tanto como no debió hacerlo si el que estaba enfrente, la ... Peña Sport, hubiera acertado en el minuto 83 de partido, cuando Manjón reventó el larguero de la portería de un Fermín Sobrón que para entonces ya estaba desbordado por las circunstancias del juego aéreo, primer asterisco del encuentro, en el área riojana. Abajo. Y el segundo, en el otro lado, arriba, en la de la Peña Sport, donde la UD Logroñés fabricó la goleada basada en el acierto rematador, de lo más eficiente para un equipo con gancho, porque así lo manifiestan los 15 goles que suma el equipo en ocho jornadas, un hecho histórico ante la carestía histórica de la UD Logroñés en años anteriores.
además
Triunfo con asteriscos a los tres puntos sumados, a la segunda victoria consecutiva, a la segunda plaza de la clasificación, a los cinco triunfos logrados en ocho jornadas. Asteriscos que se cierran con puntos suspensivos a la espera del partido de Copa del Rey del próximo miércoles, que sin duda condicionó y mucho la alineación inicial de Carlos Pouso, que cambió al completo la defensa blanquirroja, desde la portería hasta los cuatro de atrás, salvo por la presencia de Borja García. Y fue en las área donde la UD Logroñés resolvió el partido tanto como se lo complicó. En un arranque fantástico, de guitarras eléctricas, Jordan hizo en el primer minuto, sin que el rival llegara a tocar ni una vez el cuero, un gol para grabar. Y Pere Milla tuvo el segundo en un mano a mano con Jorge que el ilerdense no supo resolver.
Y de ahí al otro área, cuando la Peña Sport halló el punto débil de los riojanos, balones al punto de penalti donde las dudas pusieron la carne de gallina a los seguidores riojanos. El primer cuero a esa zona se le cayó al joven meta riojano al suelo, y de ahí a la red con el remate de Manjón. Minuto 40. Asterisco como un piano de grande, al que se le puso remedio en el otro área, con la versión magnífica del Sergio Reguilón atacante que se la puso a Pere Milla casi en la red, que acabó de acercar la pelota con un cómodo remate de cabeza. Minuto 43. Asterisco a modo de aviso. Una reacción es posible, dos improbable.
Y casi la necesita la UD Logroñés, tras dos nuevas dudas en balones largos al punto de penalti con Fermín Sobrón desencajado, al que le fue imposible ver llegar el golpeo bestial que se marcó Manjón, el mejor de ellos, en el minuto 83 que se estrelló en el larguero. El empate estuvo cerca. El susto se metió en el cuerpo. Había que buscar el asterisco del otro área. Allí apareció Carlos Fernández para hacer el tercero de la noche, su segundo tanto de forma consecutiva en dos jornadas, de cabeza, de perfecto gesto al segundo palo. Victoria con asteriscos, colocados en las áreas, que abren los puntos suspensivos sobre la capacidad de lo UD Logroñés para cerrar los partidos ante rivales verdaderamente inferiores, como el Atlético Astorga hace 21 días o el Peña Sport hace pocas horas.
*Gran acierto rematador de los delanteros riojanos.
*Serios problemas de Fermín Sobrón en los balones largos.
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