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«Mi camino es el de la verdad y del trabajo, lo demás me es indiferente». Luis Rubiales pasó de puntillas sobre la investigación abierta por el juzgado de instrucción número 6 de Valencia sobre el presunto empleo de dinero de la Asociación de ... Futbolistas Españoles (AFE) para sufragar parte de la reforma de su casa cuando estaba al frente del sindicato.
Un día después de que la cadena SER destapase la apertura de diligencias previas por un presunto delito de administración desleal a raíz de una querella presentada por el presidente del Centro Nacional de Formación de Entrenadores de Fútbol (Cenafe), Miguel Ángel Galán, el máximo dirigente de la Federación Española de Fútbol aseguró que no está preocupado y remarcó que lleva «un tiempo sufriendo falsedades» pero que está «satisfecho» con el comportamiento que siempre ha tenido.
«Creo que ya ha hablado AFE sobre esto. Hoy es el día más importante del fútbol español y no entro en falsedades. Me he mantenido al margen de todo esto, tendrá que seguir habiendo resoluciones judiciales y yo siempre voy con la verdad por delante», proclamó Rubiales al término de la Asamblea General de la FEF, en la que pidió «respeto» para el organismo y «para quienes están pasando por una situación judicial».
Rubiales aludió a la «casualidad» de que la información trascendiese un día antes de la celebración de la Asamblea, en la que repasó algunos de los asuntos más destacados de sus dos primeros meses en el cargo y en la que estuvo acompañado por los presidentes de la FIFA, Gianni Infantino, y de la UEFA, Aleksander Ceferin. Y se refirió, sin mencionarla, a la arquitecta que realizó la reforma de la vivienda situada en la capital valenciana. «Hoy mismo he conocido un auto muy duro para esa persona, en la que se la imputa por acoso contra mí y contra mi familia, que hemos sufrido durante mucho tiempo. Pero no quiero ni hablar de su nombre, creo que quiere permanecer en el anonimato»
Rubiales se escudó en que era «un día de alegría» con la presencia de las cabezas rectoras del fútbol mundial y del europeo. Se mostró «radiante y feliz» por el respaldo que le ofrecieron tanto Infantino como Ceferin y no quiso entrar en un cuerpo a cuerpo con Miguel Ángel Galán, respecto al que sostuvo que no tiene «nada que decirle». «Ojalá todo el mundo haga lo mejor por los demás, por el fútbol, y ese es mi cometido, estoy aquí para trabajar por el fútbol y cada uno tiene que responder por sus propias acciones», remachó.
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