El juez prohíbe acercarse a Anoeta a los ultras del Anderlecht en libertad tras los altercados

Es la única decisión que se ha tomado desde el juzgado de guardia de San Sebastián antes de que se celebre el juicio en el que los arrestados están citados a declarar. Otra cuestión será que los cinco acusados vuelvan de su país para presentarse en el proceso que tendrá lugar en la capital guipuzcoana, cuestión que se presume improbable.

El sábado fueron puestos en libertad los tres últimos detenidos que restaban por salir a la calle. Estos estaban acusados de protagonizar desórdenes públicos durante el encuentro en el sector visitante del recinto blanquiazul. Antes, el viernes, habían quedado en libertad los otros dos individuos que causaron incidentes. Uno de ellos por atentado contra los agentes y el otro por resistencia grave a la autoridad.

Los cinco aficionados radicales del Anderlecht que fueron arrestados por la Ertzaintza fueron identificados por las cámaras del estadio, en una operación que se llevó a cabo sobre las 20.00 horas del jueves, con el partido todavía en marcha. Tal y como desveló este periódico, los cinco ultras del conjunto belga portaban la misma tarjeta de un bufete de abogados de Valencia, al que se remitieron ante la Ertzaintza para defenderse en el procedimiento.

Esta medida cautelar se extiende hasta la celebración del juicio al que no hay garantías de que se presenten los imputados

Mientras tanto, los miembros del grupo ultra del cuadro bruselense 'Mauves Army', al que pertenecen los cinco acusados de causar incidentes en Anoeta, fueron abucheados ayer por los propios seguidores del Anderlecht en el estadio Lotto Park de Bruselas durante la disputa del clásico del fútbol belga entre el Anderlecht y el Standard de Lieja. «You're fucking shit» (sois escoria) y «Shame on you» (sois una vergüenza) son algunos de los gritos que dedicaron una buena parte de la hinchada local a los ultras de su propio equipo a causa de los actos de violencia que protagonizaron el jueves en Donostia durante el partido de Europa League contra la Real.

Se da la circunstancia que ayer no hubo presencia de aficionados del Standard de Lieja en el estadio del Anderlecht debido a los enfrentamientos que se produjeron en el último partido entre ambos equipos. La propia Jupiler Pro League, de acuerdo con ambos clubes, prohibió la presencia de seguidores foráneos para evitar nuevos incidentes. Este duelo está considerado como uno de los clásicos de la liga belga.

Por otro lado, este fin de semana se ha vivido otro episodio de violencia protagonizado por aficionados radicales de un equipo de fútbol. En esta ocasión los incidentes tuvieron lugar en A Coruña, donde un centenar de ultras del Málaga provocaron altercados durante la noche del sábado en las inmediaciones de Riazor, donde ayer se midieron el Deportivo y el conjunto malagueño.

Los ultras del cuadro andaluz pertenecientes al 'Frente Bokeron' causaron destrozos en un bar donde se suele reunir el grupo ultra del conjunto coruñés, 'Riazor Blues'. El Deportivo, el Málaga y LaLiga han condenado y denunciado los altercados.

Por el momento no se ha producido ninguna detención en relación a estos sucesos y la policía trabaja para identificar a los responsables. El partido tenía consideración de alto riesgo por la posibilidad de enfrentamiento entre radicales de ambos equipos.