La SD Logroñés acaba el año de la mejor manera posible

Hubo un momento del curso en el que parecía que todo iba en contra de los riojanos. Jugaban bien, creaban ocasiones, pero los triunfos no llegaban. Una mala dinámica de la que cuesta salir, pero que la SD Logroñés ya ha dejado atrás hace semanas. Ahora a los de Llona les sucede todo lo contrario. Aquello que puede ir bien va incluso mejor de lo esperado.

En Lezama, la Sociedad tuvo que tirar de su fútbol más práctico, cediendo incluso por momentos la iniciativa del juego a un Athletic B que llegaba al duelo con muchas urgencias y que mostró una falta de colmillo en ataque que le impidió poner en problemas a la zaga blanquirroja.

No en vano, y aunque los vizcaínos tuvieron el balón en los primeros compases no generaron ocasiones, mientras la SDL esperaba su oportunidad. Como un león que aguarda a que le abran la puerta de la jaula para mostrar su furia. Avisó Samanes con un zurdazo que se estrelló en el larguero y después los blanquirrojos sacaron partido de una de esas acciones del juego que hay que dominar para rendir en esta categoría: el balón parado.

Primero Monreal obligó a Ispizua a mandar a la esquina una chilena y de ese córner nació el 0-1. Para ganar hay que hacer muchas cosas bien y también tener una pizca de suerte: Borja Martínez puso el balón en juego, primero Chasco lo prolongó en el primer palo y después Mendibe lo remachó a la red. Dos jugadores del Athletic B. La suerte hay que buscarla.

Se le ponía bien así el partido a los logroñeses, quienes pudieron sentenciar antes del descanso tras una jugada de Castri que acabó con un remate de Unzueta y una gran parada de Ispizua.

Cuando las cosas van mal las decisiones arbitrales también parece que juegan en contra. Le ha pasado a la SDL este año, pero no fue el caso. De hecho, el Athletic B se quedó con diez nada más empezar la segunda parte. Dos faltas hizo Rincón en todo el partido, las dos sobre Manny y en las dos se llevó amarilla.

Con ventaja en el marcador y sobre el campo, parecía difícil que el partido se le escapara a la SDL. Sin embargo, los riojanos no lograron matar la contienda y el Athletic B buscó el empate. Eso sí, solo lo acarició con un cabezazo de Gerenabarrena que se marchó fuera tras besar el larguero.

La sentencia tardó en llegar, pero llegó en el 88. Manny apuró hasta la línea de fondo y con su centro dejó solo a Alain Ribiero. Cabezazo a la red, victoria y vacaciones. La SD Logroñés sonríe, también lejos de Las Gaunas.