La SDL se hunde con todo merecimiento

El vicecolista ganó (0-2) con un partido redondo en el que presionó alto a su rival y buscó la portería contraria sin miramientos, de la manera más directa posible, sin florituras pero con contundencia. Y se llevó un justo y meritorio triunfo. La SDL se hunde con este resultado con todo merecimiento, porque no hizo nada para obtener el premio de los tres puntos. La final se la llevó el que fue a por ella.

Salió con más intensidad el Teruel, con la intención de jugar en el campo de la SDL de inicio y presionar a su rival arriba. Y no se había alcanzado el primer minuto de juego cuando un pase en profundidad por la derecha fue cortado con la mano por un superado Paredes, que vio la amarilla.

A los cinco minutos, Uri fue a despejar en largo un balón sencillo cedido por un compañero y el cancerbero local golpeó en un rival que intentaba dificultar la salida local. Aunque el esférico volvió sin peligro a las manos del portero blanquirrojo, supuso un aviso y una muestra evidente de la falta de confianza en estos primeros envites del choque de los de Larrazabal.

Diez minutos les costó acercarse por vez primera a los de Larrazabal a los dominios de Taliby. Lo hizo con un buen centro de Manny que se paseó por toda el área visitante ante un Ferni que no pudo llegar.

Sin embargo, era el Teruel el que tenía las cosas más claras. No especulaban los aragoneses. Querían robar arriba y, una vez recuperado el balón, tardaban poco en buscar a sus hombres adelantados. Juego directo y velocidad con elaboración justa. Ganaban casi todas las batallas y balones divididos y, en uno de esos duelos, Aparicio se imponía a la defensa local, cedía a Borja Martínez, que recortaba a Gexan y disparaba pegado a la cepa del poste izquierdo pero por fuera. Se cumplía el primer cuarto de hora con una SDL poco atinada. Pascual lo intentó poco después con un tiro lejano que se marchó fuera.

Le faltaba mucha velocidad de circulación a los blanquirrojos ante un equipo muy junto y en tensión. Y, a pesar de todo, intentó sacar rédito de una jugada de pizarra desde el córner que golpeó fuera Paredes. Y en el minuto 24 llegó la mejor oportunidad de los locales. Manny, el más incisivo, profundizó hasta la línea de fondo, centró y el balón llegó a Ferni, que controló con el pecho en el segundo palo y remató con la pierna izquierda fuerte y raso pero sin demasiada dificultad para un Taliby que detuvo en dos tiempos.

Se superaba la media hora del partido cuando el Teruel atacó por la izquierda, y un centrochut con la derecha de Tena se dirigió al corazón del área. Salado se lanzó y, en su intento de despejar, introdujo la pelota en su propia portería. Justo castigo para la SDL o, más apropiado, justo premio a las claras intenciones de los visitantes de ir a por el partido.

El Teruel se iba al descanso con el convencimiento de una primera mitad más que apañada en la que se había mostrado como un equipo bien plantado, que estaba compitiendo a una alto nivel y que estaba siendo muy superior al rival en un duelo importantísimo.

Ycon esa misma convicción salió el cuadro azulón en la segunda parte. En el 51, robó en medio campo, hizo una transición rápida y Borja Martínez acabó con un disparo con la izquierda que se marchó fuera. Tres minutos después, más de lo mismo, pero esta vez Borja centraba y Romero no llegaba por poco al pase de la muerte de su compañero.

No era el día de la SDL. Ni en una peligrosa falta en la frontal del área lograba encontrar la portería visitante. Garrido se estrellaba en la barrera.

Intentó agitar el avispero Larrazabal con los cambios pero el partido se había trabado y la pelea se centraba en el centro, con muchas imprecisiones. Pero el Teruel lo tenía clarísimo. Y en uno de la infinidad de robos en terreno neutro, en el minuto 67, el balón llegó a Pascual por la derecha. Y puso un centro delicioso al segundo palo para que Borja Martínez ganara la partida a Gexan y marcara el segundo tanto con un certero testarazo.

Naranjo, dos minutos después, en un error grosero de Dani Garrido, perdonó el tercero. El ariete visitante quiso su cuota de protagonismo y optó por no aprovechar el tres contra uno a su favor y apostar por una jugada personal que acabó en un disparo potente que buscaba la escuadra pero que se fue fuera.

En el 82, un pase filtrado por la derecha le llegó a Óscar, que pudo darle emoción al choque. Pero el logroñés perdió en el mano a mano con Taliby, que le sacó el balón. Ni por esas. De hecho, el 0-3 no se colocó en el luminoso gracias a un vuelo prodigioso de Uri en una falta frontal que Pascual colocó en la escuadra cuando ya se escapaba el encuentro.

Ganó el Teruel, que se abrazó como si hubiera ganado una final sobre el césped. No había trofeo pero el premio que puede obtener gracias en parte a este triunfo puede valer mucho más que una copa a la entidad aragonesa. La SDL, mientras tanto, se quedó sin premio porque no lo buscó. Merecido castigo.