En la peor campaña de su historia en la categoría, la Sociedad Deportiva Logroñés se aleja cada vez más de su objetivo de la permanencia. La derrota in extremis en casa del Unionistas fue un palo duro para los blanquirrojos, que segundos antes de que ... le pitaran el penalti en contra habían reclamado una mano en la otra portería. De poder ganar a encajar una nueva y dolorosa derrota. Y todo en el tiempo de descuento.
Publicidad
Poco después de certificarse el 1-0 en contra, las redes sociales se llenaron de mensajes de los aficionados del conjunto riojano reclamando la cabeza de Aitor Larrazabal. El entrenador vasco es consciente de la mala campaña del equipo y que en cualquier momento le pueden soltar la mano desde el club.
Tras el encuentro, el míster se mostró «frustrado»: «Haces un buen trabajo, por lo menos defensivo. Quizás en el aspecto ofensivo no hemos estado acertados en las ocasiones que hemos tenido por imprecisiones y esa ansiedad que tenemos de intentar ganar los partidos porque necesitamos sumar de tres en tres. Eso nos lleva al nerviosismo y a no terminar la jugadas de la mejor manera posible», apuntó. «Las tomas de decisión son lo más importante y nosotros pecamos de esa precipitación», agregó Larrazabal.
Aunque explicó que las jugadas de ambas polémicas (el penalti no pitado por mano de Jiménez y la falta dentro del área de Miceli) nos las pudo ver con claridad, el preparador comentó que un jugador local le confesó que «había sido un atraco». «Entonces entiendo que los jugadores lo han visto lo suficientemente bien como para saber lo que ha ocurrido», sostuvo.
Matemáticamente, la SD Logroñés tiene posibilidades de conseguir la permanencia. Pero la realidad no invita al optimismo. Y es que, mientras que los blanquirrojos no suman, sus rivales en la lucha por la salvación han ensanchado las diferencias con el cuadro riojano.
Publicidad
Así las cosas, el Sabadell ganó en casa del Fuenlabrada (1-2) y trepó a los 33 puntos. Los mismos que ostenta el Tarazona, que también venció –1-0 al Celta Fortuna– y salió de la zona roja. El Teruel, que hace unas jornadas era el farolillo rojo, también sumó tres puntos al derrotar al Real Unión por 2-1. Y hay que esperar qué ocurre con el Sestao-Rayo Majadahonda.
Es decir, con ocho jornadas por delante, la permanencia se queda a siete puntos para los blanquirrojos, que van perdiendo las esperanzas de seguir el año que viene en la categoría.
¡Oferta 136 Aniversario!
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.