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La Sociedad Deportiva Logroñés volvió a sonreír. Y lo hizo por partida doble: sumando tres puntos de esos que llaman de oro ante un rival directo en la lucha por la permanencia como el Teruel, que acabó el partido con nueve jugadores por las expulsiones ... de Facu García y Pascual. El valioso triunfo blanquirrojo se fraguó en la segunda mitad gracias a los goles de Toni García, poco después del paso por vestuarios, y de Luzzi en los minutos finales. Con esta victoria, los riojanos cogen oxígeno y se alejan un poco del descenso, donde hundieron al cuadro turolense, que queda como colista del grupo.
Y eso que no comenzó fina la SD Logroñés. Nuevamente demasiado replegada atrás, el Teruel se adueñó del balón durante los primeros minutos de juego, creando algunas ocasiones de gol para los locales. La primera a los tres minutos, cuando Borja Martínez, un dolor de muelas en el flanco izquierdo, estrelló un zurdazo cruzado en el palo de un batido Iruarrizaga.
Teruel
Taliby, Pascual Julen (Buenacasa, 72), Cabetas, Gaixas (Alastuey, 65), Romero, Facu García, Castillo, Aparicio (Ahn, 61), Borja Martínez y Villa (Sanchis, 72)
0
-
2
SD Logroñés
Iruarrizaga, Gexan, Murua, Trespalacios, Ezkurdia (Óscar, 58), Jannick (Luzzi, 71), Castellano, Cova, Toni García, Jaráiz (Damià, 71) y Escobar
Una clara oportunidad que no fue otra cosa que un aviso, porque la insistencia turolense fue a más. Los blanquirrojos, otra vez sometidos, no podían salir cómodamente con el balón y el equipo se hacía demasiado largo, con Jordi Escobar muy solitario, acompañado en el apartado ofensivo por Jaráiz, una de las novedades del once presentado por Andrés García.
Excesivamente lenta en las transiciones, la SDL nunca sorprendió a un Teruel mucho más relajado en tareas defensivas y bien plantado. Su primera llegada seria, al margen de un cabezazo de Murua que se fue alto en el séptimo minuto llegó en el 39. Javi Castellano puso un centro en el corazón del área, Trespalacios bajó el esférico y Jordi Ecobar remató. Sin embargo, Murua, que había subido a cabecear, se interpuso en el camino del gol.
El técnico blanquirrojo demandó más protagonismo con el balón durante la semana de trabajo previa, pero la SDL, sin ritmo alguno, estaba muy lejos de la premisa sin nadie que ayudara a Javi Castellano a llevar el cuero de forma clara al último tercio de campo del Teruel.
No obstante, en el último tramo de esa primera mitad, los riojanos dieron un paso hacia adelante. Los de Andrés García se habían sacudido la intensa presión local de la primera media hora y se alejaban de la portería de Iruarrizaga, que evitó sobre el palo derecho el tanto de Borja Martínez en el 36. El portero vasco volvería a intervenir para salvar a los suyos al filo del descanso en un tiro libre desde el vértice del área de Romero.
Todo cambió tras el paso por vestuarios. La SD Logroñés se mostró más valiente que los 45 minutos anteriores, salió de su cueva y rápidamente obtuvo premio: en una jugada bien trenzada por la izquierda, el goleador Jordi Escobar esta vez fue el que asistió para filtrar al espacio un balón que Toni García aprovechó para batir a Taliby con un zurdazo cruzado. Un 0-1 que se hizo más fuerte tres minutos después cuando el argentino y exHaro Facu García se marchaba expulsado por doble amarilla. En escasos minutos, el encuentro se le ponía muy de cara a los riojanos. La concentración volvía a jugar un papel primordial en el encuentro.
Le entraron las prisas al Teruel, que reclamó un segundo penalti, y achuchó a una SDL con mucha más confianza y que se aprovechó de los espacios. No obstante, Romero pudo igualar las cosas en el 78 cuando recibió un pase de la muerte de Sanchis, que se había ido de Gexan, pero su balón salió muy alto.
Mejor le fueron las cosas a los blanquirrojos dos minutos después ya que veían cómo un desquiciado Teruel se quedaba con un hombre menos después de que Pascual viera la segunda amonestación. A los de Andrés García no se le podía escapar el triunfo. Solo debía limitarse a no equivocarse.
Pero no iba a ser sencillo. Porque una indecisión por poco penaliza a los visitantes justo antes de la sentencia. Los centrales cometieron un grave error en un desajuste defensivo y Borja Romero se quedó mano a mano con Iruarrizaga, que salió a achicar providencialmente.
Un susto importante que hizo espabilar a los riojanos, que un par de minutos después pusieron el broche al choque. Fue gracias a un remate de Luzzi que en posición de delantero centro envió a gol un centro de Cova. Asunto finiquitado. La Sociedad Deportiva Logroñés volvió a sonreír y se aleja del abismo.
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