La SD Logroñés, en descenso quince meses después

Dos temporadas y media lleva la SDL en esta Primera Federación, desde que la categoría se estrenó para sustituir a la antigua Segunda División B, y los logroñeses han acabado más jornadas en plazas de 'play off' de ascenso que en las que significan el descenso a Segunda Federación. Entre los cinco primeros, de hecho, los logroñeses han estado en siete ocasiones (tres en el ejercicio 2021-22, dos en el 2022-23 y otras dos en la presente campaña), mientras que entre los cinco últimos se han encontrado cinco veces.

Los riojanos, entrenados por aquel entonces por Raúl Llona, no pisaron las plazas de castigo en ningún momento en su debut en la categoría. El club vivió su primera temporada al completo fuera de la quema, lo que habla muy bien de ese primer curso en Primera Federación. Su segunda temporada, mientras, no comenzó bien. Lo hizo con dos derrotas, una en casa frente al Alcoyano y otra en Urritxe contra el Amorebieta, y esos resultados llevaron a los blanquirrojos al descenso. Ese mala racha se cortó con un triunfo ante La Nucía, pero esos tres puntos no impidieron que los logroñeses salieran de esos puestos que nadie quiere ver ni en pintura.

Sí que lograron ese objetivo con el triunfo, una semana más tarde, en el derbi ante la Unión Deportiva Logroñés, pero tras la derrota en la octava jornada frente al Eldense el equipo volvió a caer a la decimosexta posición de la tabla. Quintos por la cola, es decir, descenso.

Más tarde, los de Llona iniciaron una trayectoria al alza que les llevó incluso a llegar a los últimos encuentros con opciones de premios mayores, como entrar en el 'play off' de ascenso o clasificarse para la Copa del Rey. Finalmente, se conformaron con un más que notable noveno puesto final.

Aquella decimosexta posición de mediados de octubre de 2022 tras perder en Elda se mantenía, por lo tanto, como la última semana con los blanquirrojos en descenso. No en vano, el buen comienzo firmado por el equipo al principio de la presente temporada les alejó de esas plazas y les llevó a convivir, incluso, con los mandamases del grupo. A partir de ahí, los riojanos han ido marcando una tendencia claramente descendente en la que se habían librado de entrar en el descenso. Sin embargo, la reacción del Tarazona en las últimas jornadas y la mala racha riojana han provocado que los capitalinos vuelvan a la zona roja. Quince meses después.