Jordi Escobar y el gol hacen las paces

El calendario marcaba el 11 de noviembre del pasado año. La Sociedad Deportiva Logroñés recibía en Las Gaunas al Tarazona. Transitaba ya el equipo por una zona peligrosa y la victoria se antojaba imprescindible. Una situación parecida a la del pasado fin de semana. Y Jordi Escobar no faltó a su cita con el gol. Abrió el marcador y contribuyó al triunfo final (2-1). Era el quinto gol del delantero blanquirrojo en once jornadas.

Han tenido que transcurrir 83 días para que Escobar, el pichichi del equipo, vea puerta de nuevo. Una explicación muy gráfica de por qué la DL se encuentra en puestos de descenso.

Jordi Fabregat, Andrés García y Aitor Larrazabal. Diferentes técnicos en lo que llevamos de temporada, pero una misma solución contra la falta de gol: Jordi Escobar. El delantero está siendo un fijo en las alineaciones de la Sociedad con independencia de quién ocupa el banquillo blanquirrojo. El futbolista catalán suma con su último tanto seis aciertos y es el máximo goleador de los riojanos con mucha diferencia sobre el siguiente, Rubio –lesionado de larga duración–, con dos dianas.

Lo cierto es que la buena primera vuelta de Jordi Escobar no ha pasado desapercibida para el resto de conjuntos de la liga. Incluso para los de la categoría superior. Mucho ha sonado el delantero de Sant Cebrià de Vallalta en el mercado de invierno como posible refuerzo de varios equipos. De momento, mañana finaliza el mercado y el jugador no se mueve. Buenas noticias para el equipo.

Lo cierto es que el gol de Escobar del sábado en Las Gaunas no solo ha supuesto el final de una mala racha (la suya con el gol) sino que en realidad ha cerrado tres. La segunda también tiene que ver con la salsa del fútbol, pero en este caso es colectiva.

Y es que la SDL comparecía a la jornada 21 después de protagonizar cuatro encuentros consecutivos sin ver portería: SDL 0-Nástic 2; Osasuna B 3-SDL 0; SDL 0-Ponferradina 3; Rayo Majadahonda 1-SDL 0. En total, seis horas sin ver portería. Demasiada penalización para un equipo que necesita urgentemente refuerzos positivos en forma de gol.

La tercera mala racha que ha fulminado Jordi Escobar con su gol ha sido la protagonizada por el nuevo entrenador del club. La llegada del técnico vasco y su segundo Gorka Iraizoz tenía como objetivo enderezar la inercia de resultados de la Sociedad Deportiva Logroñés hasta lograr la salvación final. Lo cierto es que, de momento, el pulso del paciente había mejorado pero no se materializaba en la clasificación. Y para ello hacen falta goles.

Así las cosas, Jordi Escobar dio aire al equipo blanquirrojo y, por extensión, al técnico Aitor Larrazabal. Ahora hace falta que estas buenas sensaciones de las últimas jornadas tengan continuidad. Etapa dura la que se presenta a la Sociedad en las dos próximas semanas. Este domingo los blanquirrojos viajan a tierras catalanas para enfrentarse al Barcelona en el primer partido de la segunda vuelta. Lejos queda ya aquella victoria en Las Gaunas (1-0) con gol de Escobar, para abrir la temporada. Ahora los catalanas son sextos en la clasificación con 34 puntos y se asoman a los puestos de 'play off'.

Y la semana siguiente visita el estadio de Las Gaunas uno de los clubes históricos del fútbol español: el Deportivo de La Coruña. Otro duro hueso de roer para los blanquirrojos que son conscientes de que sus opciones de permanencia pasan por hacerse fuertes en los partidos de casa.