Pasarela de jóvenes futbolistas

Inicialmente, el Club Deportivo Berceo vistió de blanquirrojo en sus primeras comparencias, porque lo hizo con una equipación cedida por el Rayo (que acababa de desaparecer), pero esas equipaciones se estropearon y Luis Santos tuvo que 'apañar' unas con la tela de los sacos de azúcar. A él le hubiera gustado que hubieran sido blancas (como su Madrid), pero la tela no admitía bien el tinte blanco, y el uniforme debió ser verde.

Así dio sus primeros pasos, ya en 1948, el Berceo y en 1973, la directiva del club verde –que en ese momento presidía Ricardo García– decidió celebrar el 25 aniversario del club con distintos actos, entre los que se incluyó un torneo de fútbol juvenil en el que junto a los verdes participaran el Athletic de Bilbao y la Real Sociedad. Aquella fue la primera edición del Torneo Ciudad de Logroño.

El primer partido enfrentó a los dos clubes vascos y después el Berceo esperó al ganador. El Athletic venció a los donostiarras por 3-1. El primer gol de la historia del torneo lo marcó un fino delantero rojiblanco llamado Manu Sarabia. Al día siguiente, en la final, los jóvenes leones también se impusieron al Berceo. Esta vez el resultado fue 3-0 y la actuación más sobresaliente la firmó el central vasco, Andoni Goikoetxea.

Un año después, el torneo adoptó la que ha sido su fórmula más tradicional: el cuadrangular. Y lo hizo con una doble sede porque las semifinales se disputaron en La Arena (sede habitual de los partidos del Berceo) y la final, nuevamente en Las Gaunas.

En 1976, la principal novedad fue la entrega de un bocadillo y un vaso de vino por el precio de la entrada. La iniciativa tuvo una gran acogida, tanto que en la primera jornada, hubo más entradas vendidas que bocadillos porque se superaron todas las expectativas.

El Torneo 'Ciudad de Logroño' se convirtió en todo un referente. En esa época no se podía ver en La Rioja a los grandes equipos nacionales, ni siquiera en categoría Juvenil, pero al menos una vez al año –en pleno verano– las que luego serían grandes figuras (Argote, Ablanedo, Pedraza, Endika, Iñaki Vergara, luego jugador del Logroñés) pasaron por la capital riojana.

En 1983, el Berceo decidió entregar al equipo ganador una reproducción de la puerta de El Revellín, diseñado por joyería Mangado y con un peso que ronda los 20 kilos, lo que contribuyó a revalorizar el torneo. Beguiristain, Iturrino, Carlos Busquets, Jordi Lardín, Fran Navarro, Guardiola, Sergi, Lopetegui o Julen Guerrero son algunos de los jóvenes que visitaron Las Gaunas en la siguiente década.

Como ellos, muchos de los jugadores que ahora militan en Primera División visitaron Logroño como juveniles, y prácticamente todas las generaciones del Berceo han pasado también por el 'Ciudad de Logroño', que llegó a ser internacional en 1986 con la visita del Girondis de Burdeos.

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