Un día antes de la votación de los presupuestos municipales de Nájera, la oposición, que tiene mayoría en la Corporación, ha emitido un comunicado en el que sus tres partidos políticos afirman que no aprobarán las cuentas. PSOE, Izquierda Unida y Partido Riojano se han puesto de acuerdo para vetar el proyecto presupuestario del Partido Popular, que gobierna Nájera con seis de trece concejales.
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En la nota, aportan varias razones para oponerse. La primera, que «el presupuesto no responde a las necesidades de inversiones, por ejemplo, para arreglar las calles, solucionar el problema de la estación de bombeo, construir un nuevo colegio o cubrir las pistas deportivas». El segundo motivo es que el documento del PP «no contiene proyectos que dinamicen y generen riqueza para los najerinos del futuro». Finalmente, se hace mención al tema más mediático de las cuentas: el proyecto del campo de fútbol en el paseo San Julián.
A ese respecto, los siete concejales de la oposición aseguran «que tenemos el compromiso de preservar el paseo, por lo que rechazamos construir allí el nuevo campo». Asimismo, PSOE, IU y PR dicen que han logrado un acuerdo para reformar La Salera. Ese proyecto, propuesto hace dos años por el grupo socialista mientras gobernaba, no llegó a ejecutarse. Y de hecho, hace un mes, cuando volvió a votarse, ni PR ni IU se posicionaron a favor. Ahora parece que sí, pero como el Partido Popular no quiere esa obra, todo indica que Nájera seguirá sin nuevo campo de fútbol hasta, al menos, el año 2027.
Con esta decisión, la crispación política y social en Nájera ha llegado al paroxismo. La falta de consensos y las rencillas personales dominan totalmente el ecosistema local. Este miércoles, antes de la votación, hay prevista una manifestación ciudadana convocada por el Náxara Club Deportivo, a las 18.30 horas en la plaza de España, para apoyar el proyecto del campo en el paseo.
Respuesta del PP
Como respuesta a los partidos de la oposición, el PP ha emitido una nota de prensa en el que hace «un llamamiento a la responsabilidad y al sentido común de todos los grupos políticos representados para que no olviden su compromiso con los vecinos y antepongan el interés de la ciudad al partidista».
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«No caben boicots en un proyecto de ciudad tan demandado», aseguran los populares, que dejan claro que «el futuro inmediato del campo de fútbol está ligado a la aprobación de los presupuestos municipales para 2025». «Resulta intolerable que la oposición utilice al fútbol base como rehén con el único objetivo de bloquear la acción del Gobierno municipal», incide el partido del alcalde Jorge Salaverri, que avisa de que, «si alguien vota en contra de este nuevo campo, estará votando en contra de Nájera y de los najerinos».
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