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Rodrigo Errasti Mendiguren
Martes, 3 de junio 2014, 03:13
La selección española ya está en el continente americano. Aterrizó a las 19.54 hora local en el aeropuerto de Baltimore, después de casi ocho horas de viaje en el Airbus A330 'Juan Carlos I', el avión de la selección personalizado para la cita con ... el lema «Llevamos la ilusión de todo un país», que lucía fotos de aficionados ataviados con los colores de la selección.
En el aeroplano los internacionales se hicieron fotos para actualizar sus redes sociales con unos reposacabezas personalizados y después bromearon sobre los insistentes rumores que colocaban a Cesc Fábregas en el Chelsea como sustituto de Frank Lampard, que anunció su marcha hacia el New York City. Allí coincidirá con David Villa, uno de los más perseguidos a la llegada de la expedición en el aeropuerto, donde un centenar de aficionados esperaban a los futbolistas después de pasar la frontera y el control de aduanas. Uno de los que más fotografías se hizo con los hinchas fue Diego Costa, muy sonriente y que estuvo cerca de Sergio Ramos todo el viaje.
El otro más aclamado, Manolo el del Bombo, un clásico de la selección que no se quiso perder el partido del próximo sábado ante El Salvador.
El equipo, que ya había cenado en el avión, se marchó directamente a descansar a su hotel de concentración en Washington, donde la temperatura era similar a la dejada en Madrid, de cara a adaptarse al horario americano y mitigar los efectos del jet-lag. Después, se ejercitará cuatro sesiones antes del amistoso, que será el último test para que Del Bosque haga pruebas de cara al estreno contra Holanda ya con los internacionales de Real Madrid y Atlético en el grupo.
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