CD Calahorra

Victorias que hacen crecer y alivian

La situación del Calahorra ha dado un giro positivo después de un inicio de campaña en el que arrastraba malos resultados. En sus cuatro primeros partidos sumó tres derrotas y un empate que le llevaron a las últimas posiciones de la clasificación. Y en los cuatro encuentros más recientes ha dado la sumado 8 puntos de 12 posibles. En Zubieta los rojillos empataron a un gol, en la siguiente jornada firmaron tablas, sin goles, contra el Alfaro en La Planilla, y en los dos últimos partidos han ganado. El miércoles pasado ante el Barbastro 0-1 en una cita aplazada del 21 de septiembre. El domingo se impusieron al filial del Real Zaragoza, el Deportivo Aragón, por 2-3, con el gol del triunfo en el tiempo añadido.

Antes de esta racha positiva el técnico, Iñigo Valencia, aseguraba que iba a continuar con la misma dinámica, porque no fallaba el planteamiento ni el trabajo realizado por los jugadores durante los entrenamientos.

En el mismo sentido se manifiesta el futbolista Víctor López, el lateral derecho riojano (también ocupa el puesto de extremo en algunas ocasiones) es un titular fijo en el esquema de Valencia, ha jugado las ocho jornadas, en siete el tiempo completo. Acumula el que más minutos (718), y en Zaragoza marcó un gol y dio la asistencia del tercero. «Sabíamos que teníamos que seguir en la misma línea. Ahora el trabajo es el mismo, pero los resultados han cambiado», explica Víctor.

«Ha habido partidos en los que hemos tirado veintiséis veces a puerta y no hemos metido ninguna y, sin embargo, en los tres últimos habremos lanzado a puerta tres o cuatro veces. En Barbastro entró una y en Zaragoza tres. Eso es lo que cambia. Los goles hacen bueno o malo al equipo», señala el futbolista.

Reconoce que todos los jugadores y cuerpo técnico sentían la responsabilidad de tener que dar un giro a la dinámica al estar en una situación que no se podía permitir, por ellos, por el club y por la afición.

«Las primeras victorias nos han aliviado y nos hacen creer en nosotros. En Barbastro se decidió por una acción individual de un compañero (Gouda) y en Zaragoza fue un partidazo para todos, porque los dos rivales fuimos a por los tres puntos. Al final lo conseguimos nosotros en la última jugada por creer y por ganas de ganar», continúa Víctor.

El futbolista logroñés recaló este verano en el Calahorra después de lograr ascender a Primera Federación con el Zamora en la campaña anterior.

Asegura que «en los últimos meses del campeonato anterior tenía claro que quería volver a vivir en Logroño y cuando mi representante me dijo que el Calahorra estaba interesado, vi el proyecto creí y creo en él y decidí firmar». Continúa diciendo que «tenemos un equipazo tanto a nivel deportivo como humano, pero eso no te hace ganar. Debemos ir con mucha cautela y humildad, para afrontar cada partido al máximo, sin miedo a ningún rival, pero con respeto».

Después de descansar el lunes y el martes (física y mentalmente tras unas semanas duras), hoy el Calahorra retoma los entrenamientos con la misma dinámica y con el objetivo de sumar otros tres puntos el domingo en La Planilla, a las 16.30 horas, contra el Deportivo Alavés B.