El Villarreal golea camino de Europa

Una victoria del Villarreal prácticamente descartaría al Celta, que en el caso de obtener la victoria metería presión a Sevilla, Getafe y Girona, los equipos que le preceden en la tabla.

Desde el lado de los castellonenses, el equipo llega con las ausencias de Bruno Soriano desde que comenzó la temporada y con la de Javi Fuego, quien con molestias en el tobillo no ha podido entrar en la lista de convocados.

La buena noticia en este capítulo es el regreso de Daniele Bonera y Pablo Fornals, ambos recuperados de las molestias que les dejaron fuera del equipo en los dos partidos anteriores.

En el caso de Pablo Fornals, el jugador podrá jugar gracias a una férula en su brazo derecho, con la que protegerá la fractura de en el quinto metacarpiano. A estas dos recuperaciones se suma el regreso de Jaume Costa, que no pudo jugar el último partido por sanción, aunque la lista de convocados no la facilitará hasta horas antes del encuentro.

Cabe recordar que el Villarreal no jugó este fin de semana al tener su partido aplazado por la final de la Copa del Rey, lo que hace que el equipo llegue al partido tras un fin de semana de descanso en el que ha podido recuperar efectivos y preparar el encuentro con más tranquilidad.

El Villarreal podría mantener el sistema 4-2-3-1, con el que se han logrado los últimos resultados positivos, sin descartar el cambio al 4-4-2, aunque con el mantenimiento en ambos casos del doble pivote.

El once estaría formado por Sergio Asenjo en la portería y una defensa con Mario Gaspar, Álvaro González, Víctor Ruiz y Jaume Costa, con un centro del campo con Rodrigo Hernández y Manuel Trigueros como doble pivote, con Samuel Castillejo y Denis Cheryshev en las bandas.

En ataque podrían estar Carlos Bacca y Daniel Raba en ataque, con la opción de jugar con dos puntas o hacerlo con Bacca como punta más adelantado y Raba como una media punta en un sistema 4-2-3-1.

El Celta tendrá una nueva oportunidad para mantener vivo su sueño europeo, en un duelo en el que sólo le vale ganar o ganar al Villarreal tras sumar siete de los últimos 21 puntos en juego.

Se juega el equipo gallego su futuro ante el último rival que le ganó en Balaídos, allá por el mes de diciembre, y lo hará sin su goleador Iago Aspas, el centrocampista Nemanja Radoja y el central Facundo Roncaglia, fuera de la convocatoria por lesión.

La buena noticia para Juan Carlos Unzué es la vuelta del lateral izquierdo Jonny, después de perderse el duelo contra el Valencia por acumulación de tarjetas. El canterano formará en una línea defensiva que completarán Hugo Mallo en el lateral derecho y la dupla Sergi Gómez-Cabral en el centro del eje.

La gran duda del once está en el centro del campo. Lobotka, Wass, Pione Sisto y Brais Méndez parecen fijos. Últimamente Unzué viene apostando por Jozabed en la medular, pero no está descartado que el chileno Tucu Hernández recupere la titularidad teniendo en cuenta la fortaleza del Villarreal en esa zona.

Como delantero centro se mantendrá el internacional uruguayo Maxi Gómez, que ante el Valencia rompió su sequía goleadora. El argentino Lucas Boyé y el turco Emre Mor esperarán su oportunidad en el banquillo.

El Villarreal se impuso por 4-1 al Celta de Vigo en un encuentro espectacular, en el que el gran protagonista fue el ariete colombiano Carlos Bacca, que firmó un triplete en el primer tiempo, que deja al equipo castellonense más cerca de jugar la Liga Europa y a los gallegos con pocas opciones.

Ambos equipos jugaron un encuentro a tumba abierta, con múltiples llegadas y ocasiones de gol para ambos equipos, si bien las más claras y numerosas fueron para el Villarreal, que destrozó la errática defensa adelantada del Celta y pudo conseguir una goleada escandalosa de haber tenido un poco más de acierto.

El partido comenzó trepidante y con polémica, ya que cuando apenas había transcurrido un minuto de juego, el meta local Asenjo cometió penalti sobre Wass, aunque el árbitro sacó la falta al borde del área, en una acción que se inició con un fuera de juego que no vieron ni el asistente ni el colegiado.

Esta acción pareció espolear el ánimo de ambos conjuntos que ofrecieron en los primeros minutos unas alternativas continuas, con rápidas y peligrosas acciones hacia una y otra área.

Así, Maxi Gómez probaba a Asenjo y en la siguiente acción una remate del central Álvaro, tras un saque de esquina, lo sacaba la zaga céltica en la línea de gol.

En el carrusel de ocasiones, Bacca estrellaba el balón en el larguero poco después. No perdonaría el ariete poco después, cuando aprovechó un error de Hugo Mallo, para hacerse con el balón en el área y con habilidad regateó al portero para marcar el 1-0.

A la media hora, Raba falló una clamorosa ocasión de gol, tras una gran contragolpe guiado Cheryshev y apenas un par de minutos después empataba el Celta, tras un disparo de Sisto que contó con la colaboración inesperada del meta Asenjo.

Apenas pudo disfrutar el Celta de la igualada, ya que el Villarreal se desató con furia en ataque y desarboló al conjunto vigués. En apenas tres minutos, Bacca marcó por partida doble, firmado un triplete que incluso pudo ser un póquer de goles, de no ser por una espectacular mano de Sergio.

El colombiano deshizo el empate apenas un minuto después del gol del Celta, tras un rápido contragolpe, en el que el ariete colombiano arrancó en fuera de juego.

El Villarreal cogía una y otra vez la espalda a la adelantada defensa visitante, y una galopada de Raba acabó con un centro al segundo palo para que Bacca marcara a placer el tercero.

El Celta estaba grogui y sobrevivió como pudo hasta llegar aliviado al descanso sin que el cuadro de Calleja ampliara aún más su renta.

En la reanudación, el partido arrancó de nuevo revolucionado. Raba perdonaba el cuarto y un minuto después, Sergio Asenjo sí que se mostró esta vez acertado tras un nuevo disparo de Pione Sisto, el mejor jugador del Celta en el partido.

Con el paso de los minutos, ambos equipos parecieron darse un respiro y bajaron las revoluciones de su juego. El Celta dominaba pero el Villarreal se refugiaba bien en defensa, sin conceder ocasiones, y buscando un contragolpe que sentenciara.

Unzué arriesgó con los cambios ofensivos en busca de un gol que les metiera en el partido, pero fue el Villarreal el que pudo marcar en los minutos finales, con Cheryshev de protagonista, pero el hispano-ruso falló en la definición primero y luego fue el poste el que evitó el gol. En la última acción del partido, un nuevo contragolpe permitió a Castillejo marcar el 4-1 definitivo.