Guardiola amarga al Real Madrid

Aquel día se estrenaba en Liga en el banquillo local del Santiago Bernabéu un Santiago Solari que curiosamente perdió el puesto pese a la sufrida victoria madridista en el estadio José Zorrilla en la segunda vuelta. Las derrotas en Chamartín ante Barcelona y Ajax días antes fueron decisivas. Su adiós fue el paso previo a la vuelta de Zinedine Zidane al cargo en el que consiguió tres Champions consectivas y una Liga. Eliminado de la Champions, de la Copa y con la Liga perdida el francés aceptó conducir al equipo en un doloroso final de Liga que serviría de preludio a una revolución veraniega. Se intuían muchas bajas y altas solicitadas por Zizou. Pero en volvió la competición oficial en pleno verano y aparecieron sobre el césped de Vigo los mismos de los días tristes de la primavera.

El Real Madrid ganó, se colocó líder y además con una ventaja de tres puntos respecto al Barcelona. Así, con una sonrisa, se presenta ante su afición por primera vez en el curso ante un equipo que también fue capaz de sumar tres puntos en la jornada inicial pero que no sale victorioso de Chamartín desde hace 19 años. Fue en el primer duelo de este siglo. «No es un partido trampa porque asumimos de lo que es capaz el Valladolid», recuerda Zidane. El Madrid, que no pierde un estreno como local desde hace 13 años, recupera al sancionado Carvajal y en principio no lucirá a ninguno de sus fichajes de inicio.

Debido a la lesión de Hazard, sin debutar como Mendy, y la baja por sanción de Luka Modric podría volver al equipo James Rodríguez tras dos años cedido en el Bayern, y aún dudando si irse al Nápoles de Carlo Ancelotti, aunque Isco parece partir con ventaja respecto al colombiano y a Fede Valverde. El resto se espera que sean los que ganaron en Vigo, con Bale -silbado en sus últimos partidos ante su público- en el tridente ofensivo junto a Benzema y Vinicius. El brasileño acabó la campaña como el jugador preferido de una afición que ahora está deseando tener noticias sobre el futuro de Neymar. Para bien o para mal.

El Valladolid, que disputa su segundo partido consecutivo fuera de casa de los tres que solicitó a LaLiga por las obras para la ampliación de aforo al quitar el foso de Zorrilla, llega con la idea de mostrar el mismo «descaro» de la pasada campaña pese a las bajas de Sandro y Alcaraz tras su participación en el 1-2 del Benito Villamarín. Pedro Porro, que se estrenaría, y Enes Ünal pueden ser sus sustitutos en un plan que pasa por obligar al Real Madrid a «correr hacia atrás» cuando el equipo recupere la pelota. El horario del partido ayuda al desplazamiento de 870 aficionados blanquivioletas.

Alineaciones probables

Real Madrid: Courtois, Carvajal, Varane, Ramos, Marcelo, Casemiro, Kroos, Isco, Bale, Benzema y James.

Real Valladolid: Masip, Nacho, Salisu, Kiko Olivas, Moyano, San Emeterio, Michel, Plano, Porro, Enes Ünal, Guardiola.

Árbitro: Pablo González Fuertes (Asturiano)

Estadio Santiago Bernabeu

Hora 19.00

 TV: Movistar LaLiga

Viendo la alineación del Real Madrid ante el Valladolid, uno pensaría que en vez de un partido la segunda jornada de la Liga 2019-20 estaba viendo uno de hace cuatro temporadas. Pero no. Sólo faltaba Keylor Navas, protagonista de la semana por su supuesta petición de salir antes del cierre del mercado, para que el equipo fuera igual que aquel de Carlo Ancelotti que terminó no ganando nada y con el italiano fuera del Santiago Bernabéu. Es pronto para decir que el francés seguirá sus pasos, pero el empate ante el Valladolid por un gol en el minuto 88 de Sergi Guardiola supuso un nuevo disgusto para una afición que pone bajo la lupa el nuevo proyecto... de viejos nombres.

Zidane sorprendió a todos dando la titularidad a James Rodríguez, en detrimento de Vinícius, y manteniendo en el once a Gareth Bale, el mejor en el triunfo ante el Celta en la primera jornada. Y cuando el balón comenzó a rodar se entendió lo que buscaba el francés: juego por las bandas y velocidad. El equipo blanco mandaba en el césped y presionaba arriba con la intención de robar rápido y salir 'en manada' aprovechando al galés -que volvió a jugar por la derecha- y al colombiano. Así llegaron las primeras ocasiones del británico, cuyo remate se fue rozando el palo; de James y de Benzema. De nuevo parecía un partido de hace cuatro campañas.

El Madrid era dominador absoluto del partido y salvo alguna llegada del Valladolid, parecía ser cuestión de tiempo que se abriera la lata pucelana. Rondaba el gol el Madrid, que hizo lucirse a Masip a un remate de Benzema tras una contra. El Valladolid estaba desbordado por un ataque local que fue capaz de rematar 13 veces pero que se olvidó del último pase y abusó de los disparos desde lejos. Sí mostró un buen despliegue físico y de compromiso el conjunto blanco, lo que le permitía una presión alta y unas posesiones largas en las que combinaba tan cerca del área y con tanta precisión que obligaba a los jugadores pucelanos a recular hasta su portería. Pero faltaba puntería y en el fútbol el gol marca la diferencia.

El descanso perjudicó al Madrid, que en lugar de tomar aire pareció quedarse sin él. El equipo merengue parecía descoserse en el centro y Sergi Guardiola y Ünal, cuando tocaban el balón, provocaban cierta zozobra en la zaga blanca. Zidane movió ficha y metió más mordiente con Vinícius por un James de más a menos, y con Luka Jovic por un Isco que dejó muchos detalles de calidad. Y el serbio, en el primer balón que tocó mandó el esférico al larguero tras un perfecto pase de Bale desde la izquierda, que había intercambiado la banda con Vinícius. Pasaban los minutos y el gol no llegaba.

El Valladolid, en una contra, pudo llevarse el partido. Primero salvó Sergio Ramos un pase en profundidad que dejaba a Sergi Guardiola solo ante Courtois y en la misma jugada Waldo hizo lucirse al portero belga con un disparo desde fuera del área que puso la congoja en la grada. Cinco minutos después, Guardiola le quitó el gol a Ünal tras un perfecto pase de Nacho desde la banda en pleno desbarajuste blanco. Sergio, técnico blanquivioleta, se desesperaba en la banda sabedor de que en el Santiago Bernabéu si se perdona. Dicho y hecho. Benzema cogió un balón en la frontal del área y a la media vuelta se sacó un latigazo con la pierna derecha que terminó en la portería de Masip.

     El Real Madrid se vio con la victoria en el bolsillo y el liderato, pero el Valladolid no había dicho su última palabra. Una contra terminó con un pase en profundidad de Óscar Plano a Sergi Guardiola que superó a Courtois en la salida para poner el empate en el marcador y la desesperación en un Zidane que llevaba desde que se había puesto su equipo por delante pidiendo cabeza a sus jugadores. El final del partido provocó el bajonazo en la afición, en los jugadores y en un Zidane que sabe que en los próximos días va a ser inevitable que se hable de Pogba y Neymar.