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Antonio Rüdiger tomó en abril su decisión de fichar por el Real Madrid después de mantener una conversación con Carlo Ancelotti y desoyó otras propuestas como la que le presentó el Barça, una vez que el técnico de Reggiolo le transmitió el deseo de contar ... con sus servicios. «Hubo interés por parte del Barça, pero le dije a mi hermano (su representante), que quería venir al Real Madrid, que eso o nada», desveló el central alemán en su puesta de largo como rutilante refuerzo del flamante campeón de Europa.
«La primera vez que hubo contactos entre el Real Madrid y mi agente fue en septiembre del año pasado. En abril hablé con Ancelotti. Ese contacto con el míster fue el más importante porque fue cuando decidí jugar en este club. Ancelotti me dijo que me quería aquí, que confiaba en mí y que podría ayudar mucho al equipo. Eso, a mi edad, ya es suficiente», narró Rüdiger en la rueda de prensa que ofreció después de rubricar el contrato que le ligará al Real Madrid durante las próximas cuatro temporadas. Tras poner fin a su etapa en el Chelsea, el zaguero berlinés llega a coste cero y percibirá unos nueve millones de euros netos anuales. Lucirá el dorsal '22', que hasta ahora pertenecía a Isco.
«Os puedo prometer que lo daré todo por este club. Quiero ganar todos los títulos que podamos. ¡Hala Madrid y nada más!», habían sido las primeras palabras de Rüdiger como nuevo jugador del Real Madrid después de que Florentino Pérez le diese la bienvenida describiéndole como «uno de los mejores defensas del mundo» y mostrase su convicción de que su incorporación ayudará a los blancos a ser «más fuertes y competitivos».
«El Madrid tiene muchísimos jugadores muy buenos en mi posición, pero me siento bastante seguro. Puedo aportar competitividad, algo muy saludable para cualquier equipo. Es un desafío que me interesa mucho», explicó poco después Rüdiger, que hizo gala en todo momento de esa confianza en sus posibilidades que le ha permitido erigirse en uno de los defensas más valorados del panorama actual.
Feliz y sonriente, Rüdiger, que estuvo acompañado en la presentación por su mujer y sus dos hijos, reveló que creció viendo las hazañas con la elástica del Real Madrid de Ronaldo Nazàrio, su ídolo de infancia, y también las de Zinedine Zidane, quien le dejó asombrado con la volea en Glasgow que selló la Novena. «En el Real Madrid lo más importante es la victoria. Lo ha demostrado varias veces a lo largo de los años ganando muchos títulos y Champions. Aunque hubiera dudas fuera del club, el Real Madrid ha sido capaz de conseguirlo. Es increíble», relató un futbolista que se formó en las canteras del Borussia Dortmund y del Stuttgart, club este último con el que debutó en la Bundesliga a los 18 años.
El germano fue el primer campeonato que conoció Rüdiger, quien de allí pasó a la Roma y posteriormente al Chelsea, con el que se proclamó campeón de Europa en 2021. «Para mí, tener la oportunidad de jugar en varias ligas es algo maravilloso. La liga alemana es muy física. Italia en cambio es un país muy táctico y es importante aprender a controlar cada partido. En la Premier hay que jugar muchos partidos de gran intensidad, es una liga muy física», detalló el zaguero, «emocionado» ante la oportunidad de extender ese nutrido bagaje jugando en la Liga española.
Rüdiger, que volvió a citar al exmadridista Pepe como gran referente, asume sin problemas la presión añadida que conlleva aterrizar en el Real Madrid tras una temporada en la que los blancos han reinado en España y en Europa. «Este es un club muy, muy grande, y es un paso muy importante para mí, pero intento disfrutar de la presión. Me siento muy afortunado de estar aquí, de hacer lo que amo. Es una presión que me gusta tener», aseveró el teutón, que incidió en que fichar por el Real Madrid fue «una decisión muy sencilla» y citó su «espíritu luchador» y su capacidad de «liderazgo» como principales aportaciones a un vestuario al que también se suma el centrocampista francés Aurélien Tchouaméni, presentado la semana pasada.
Minutos antes de responder a las preguntas de la prensa, Rüdiger había tenido la oportunidad de visitar la sala de trofeos acompañado por Florentino Pérez, en la que sobresalen las catorce 'orejonas' que atesora el Real Madrid. «Ver esas copas te enseña cuál es el único objetivo de este club, la victoria, y yo quiero formar parte de eso», cerró el nuevo bastión defensivo de los blancos.
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