Piqué no se perderá el Madrid-Barça

Aunque Quique Setién tiene a dos centrales más disponibles, los zurdos Umtiti y Lenglet, el catalán es imprescindible por su jerarquía y la comprensión del juego que el técnico cántabro ha implantado desde su llegada al banquillo. Es una preocupación menos para él tras las bajas conocidas de los lesionados Sergi Roberto, Jordi Alba, Luis Suárez y Dembélé. Asumidas las de los dos delanteros, de larga duración, inquieta en el Barça el nivel de Junior en el lateral izquierdo en sustitución de Jordi Alba. El exbético parece acomplejado, comete errores víctima del nerviosismo y a sus dudas defensivas añade una falta de profundidad en ataque alarmante para un equipo que se ha quedado sin extremos.

Setién dio descanso este jueves a la plantilla. Aprovechó el miércoles por la noche para viajar a Madrid junto a su ayudante, Eder Sarabia, para tomar nota en directo del momento del Madrid en el palco del Bernabéu en su partido ante el Manchester City. También dialogó luego en el hotel con Pep Guardiola, una cita con la que muchos barcelonistas han fantaseado por la posibilidad de que le pidiera algún consejo ahora que se está alejando del modelo 'cruyffista' del que se declaró abanderado cuando sustituyó a Ernesto Valverde, como se vio con su 4-4-2 en Nápoles. A los dos se les da bien Chamartín, Guardiola volvió a ganar el miércoles (1-2) y Setién ha vencido allí en sus dos últimas visitas con el Betis.

Si el equipo ha podido vivir dos días de relativa tranquilidad, Josep Maria Bartomeu y su directiva siguen esperando el informe de una auditoría para depurar responsabilidades de la crisis de las redes sociales mientras siguen apareciendo ahora noticias sobre las cuentas en Twitter que atacaban a los periodistas más críticos con la gestión del club. Pertenecían a la empresa contratada para monitorizar las redes y la mayoría ya han sido canceladas. El lío no cesa.