El Villarreal toma Balaídos

Ambos equipos llegan en alza al choque. El Celta ha empezado a carburar después de un inicio de curso titubeante; el Villarreal ha levantado el vuelo desde la llegada de Calleja a su banquillo. Europa es su objetivo y este choque puede marcar el camino, sobre todo para los vigueses, que necesitan recortar puntos a un rival directo.

La ausencia del internacional español añade más atractivo al choque, pues servirá para medir la dependencia del Celta de su máximo goleador. El fútbol del equipo gira entorno a él, y no solo por sus goles. Unzué no lo esconde. Será por tanto, un examen para su equipo pero también para su sustituto, en principio el turco Emre Mor.

La entrada del ex futbolista del Borussia Dortmund en la banda derecha podría conllevar que el Celta recuperase el 4-3-3 con el que empezó el campeonato, con Pione Sisto en el costado izquierdo y Maxi Gómez en punta, pues el sueco John Guidetti sigue sin contar de inicio para el técnico.

El otro dilema que tiene que resolver Unzué está en la línea defensiva. Sin Hugo Mallo, maneja dos opciones para el lateral derecho: situar al centrocampista danés Daniel Wass, como ya hizo contra el Barça, o reconvertir al central Sergi Gómez, que podría reaparecer tras superar la luxación en el hombro que sufrió en el Camp Nou hace quince días.

La primera de las dos posibilidades daría continuidad en el centro del campo al chileno Tucu Hernández como compañero de Lobotka y Jozabed, sin descartar al canterano Brais Méndez, la apuesta de Unzué en este arranque de curso.

El Villarreal viaja a Vigo con la idea de romper su mala racha de resultados, tras acumular cuatro jornadas sin ganar, por lo que el equipo que entrena Javier Calleja buscará los tres puntos de cara a mantener su buena situación clasificatoria, aunque se haya alejado ligeramente de la parte alta de la tabla.

Los marcadores no han estado en consonancia con el juego de un equipo competitivo al que han pasado factura los problemas añadidos en el capítulo de lesiones con ausencias de hasta siete u ocho futbolistas que han obligado a que los que estaban sanos no pudieran descansar y a contar con muchos jugadores del filial.

Estos problemas se mantienen de cara a la visita al Celta en el que siguen fuera por lesión Bruno Soriano, Andrés Fernández, Nicola Sansone y Ruben Semedo, mientras que el delantero Cedric Bakambu, que cumple ciclo de tarjetas amarillas. La buena noticia es que el técnico ha podido recuperar a Denis Cheryshev, Carlos Bacca y Víctor Ruiz, que a principio de semana estaban fuera del equipo.

Así y en el caso de Denis Cheryshev, el centrocampista ruso ha dejado atrás sus problemas de tobillo y en el de Carlos Bacca, el delantero colombiano se ha recuperado de unas molestias musculares y ha podido estar en esta convocatoria.

Con la lesión de Sansone y la sanción de Bakambu, Bacca queda como único delantero de la primera plantilla en el primer equipo, mientras que en el caso de Víctor Ruiz, el defensa ha trabajado a un ritmo menor, con la idea de poder jugar este fin de semana.

Con todo ello, el posible once para este partido estaría formado por Sergio Asenjo, que ya es fijo en la liga tras su lesión, mientras que en defensa formarán Mario Gaspar, Álvaro González, Víctor Ruiz y Jaume Costa, que viene siendo la fija y titular. Los cambios se podrían dar en la medular con la opción de jugar con doble pivote o con tres mediocampistas como frente al Barcelona.

De jugar con dos pivotes, Rodrigo y Trigueros serían la opción más clara, mientras que de jugar con tres, las opciones pasan por Rodrigo, Trigueros y Soriano, para jugar en ataque con dos medias puntas o enlaces, que serían Fornals y Castillejo, con Bacca en punta.

Un gol de Pablo Fornals en el primer tiempo, un excelente trabajo defensivo y las paradas de Sergio Asenjo permitieron al Villarreal reencontrarse con la victoria cuatro jornadas después, tras doblegar al Celta de Vigo, que se descuelga de la pelea por Europa al no aprovechar las ocasiones que tuvo en el segundo periodo para igualar el choque.

Con las líneas juntas y mucho orden, el Villarreal ahogó en la zona de creación al Celta, que acusó en exceso la ausencia de su goleador Iago Aspas. Unzué apostó por el canterano Brais Méndez para suplir al internacional español y a su equipo le faltó creatividad y desborde, lo que buscó en el segundo tiempo con la entrada de Emre Mor, cuando su rival ya mandaba en el marcador.

El choque cumplió el guión esperado. El Celta tuvo algo más el balón, aunque fue una posesión estéril, con demasiados pases horizontales, forzados por el perfecto planteamiento táctico del equipo de Javi Calleja. Aun así, los celestes dispusieron de dos ocasiones para adelantarse antes de que el Villarreal se pusiera por delante. La primera con un libre directo de Wass -minuto 14- desde la frontal y la segunda, poco después, con un remate de Jozabed al que respondió un gran Sergio Asenjo.

Sin el sancionado Bakambu, Calleja optó por situar a Pablo Fornals junto al colombiano Bacca, protagonistas de la acción que desequilibró el primer tiempo, tres minutos después de Rubén Blanco se luciese tras un disparo, ajustado, de Trigueros, que se había beneficiado de un resbalón de Jonny en el costado izquierdo.

De poco le sirvió al Celta la magnífica parada de su portero, pues un buen centro de Bacca, tras dejar atrás a Wass en el costado derecho, lo cabeceó de manera espectacular Fornals en el minuto 37 para situar el 0-1, que casi iguala Maxi Gómez antes del descanso. El uruguayo se encontró, otra vez, con un seguro Asenjo.

El resultado adverso obligó a Unzué a mover ficha en el descanso. Metió a Emre Mor por Brais y el turco nada más reanudarse el choque forzó una falta que se le fue a Wass fuera por muy poco. El Celta dominó mucho más pero su fútbol era muy previsible. No amenazaba. De otra arrancada de Mor volvió a sacar otra falta al borde del área. El tiro de Pione Sisto se le fue alto.

El Villarreal, que había dado dos pasos atrás, pudo matar el partido con un rápido contragolpe, finalizado por Carlos Bacca, quien después de marcharse de Cabral sacó un potente disparo que desvió, con dificultad, Rubén Blanco.

No se asustó el Celta, obligado por el resultado. Y otra vez Emre Mor apareció en el minuto 74. Tucu Hernández abrió a la banda izquierdo, el turco encaró a su marca y sacó un remate que Asenjo tocó la justo para que el balón tocase en el poste y acabara saliendo por la banda. En la última acción, ya en el descuento, el equipo vigués volvió a tener otra pero el remate de Sergi Gómez se marchó alto.