Getafe y Athletic se frenan en su asalto a Europa

El conjunto madrileño ocupa la novena plaza en la clasificación con 26 puntos, a sólo tres de la sexta posición; mientras que los hombres de José Ángel 'Cuco' Ziganda tienen uno menos.

El Athletic se encuentra en una buena racha de ocho partidos sin perder, en los que ha sumado 11 puntos de los últimos 15 en juego, aunque el empate de la última jornada frente al Espanyol en el RCDE Stadium le costó cuatro puestos en la clasificación, en la que es ahora duodécimo.

El conjunto bilbaíno, no obstante, espera seguir mejorando su juego con los cambios que Ziganda ha ido introduciendo poco a poco. La entrada en el once de un tiempo a esta parte de futbolistas como Ander Iturraspe, Mikel Rico, Markel Susaeta y Oscar de Marcos han influido en esa mejoría.

Aunque De Marcos será baja en Getafe por una lesión muscular. Tampoco estarán frente al conjunto azulón Kepa Arrizabalaga, por la lesión en el pie que puede hasta haber frenado su fichaje por el Real Madrid, Mikel Balenziaga, que sigue sin recuperarse de la lesión muscular que le tiene de baja desde hace un mes, e Iker Muniain, lesionado de larga duración.

Con esas bajas, es casi seguro que el equipo titular de Ziganda sea el mismo empató en la pasada jornada en Cornellà-El Prat. De haber variaciones, que no parece, entrarían Beñat Etxebarria en medio centro campo y/o el joven Iñigo Córdoba en la banda izquierda.

El compromiso de este viernes le llega al Athletic en medio de una riada de renovaciones que se están produciendo en estos días de espera en el caso Kepa, cuyo futuro inmediato no acaba de aclararse. La renovación del meta internacional era la más deseada hace unas semanas por la afición rojiblanca, ahora ya hasta harta de que el asunto siga monopolizando cada día la actualidad de su equipo.

Además, el choque del Coliseum será especialmente emotivo para Iñaki Williams, que acaba de firmar el contrato más largo y con la cláusula más alta de la plantilla bilbaína. La 'pantera' ha ampliado su vinculación con el Athletic hasta 2025, cuando tendrá 31 años, y con una cláusula de rescisión de 80 millones de euros ampliable progresivamente a 108. Es La primera que supera los 100 millones en el club rojiblanco.

El Getafe, por su parte, llega eufórico a la cita después del triunfo ante el Málaga (1-0) la pasada jornada que provocó la destitución de Míchel y le sirvió para firmar su cuarta mejor primera vuelta en las trece temporadas que suma en Primera división.

Los números del equipo de José Bordalás son bastante buenos. Siendo uno de los recién ascendidos, está cumpliendo de sobra con sus objetivos. Si bien, aunque roza la Liga Europa, en el club aún recuerdan que el año del descenso firmaron unos números similares en el ecuador del campeonato para después bajar a Segunda División.

El técnico del Getafe tiene a casi toda su plantilla disponible, incluido Markel Bergara, recuperado de una rotura del menisco en la rodilla derecha y quien podría tener minutos ante el Athletic. El resto, incluido el central togolés Djené Dakoman, que vuelve tras cumplir un partido de sanción, y el nuevo fichaje del club, el uruguayo Leandro Cabrera, podrían entrar en la convocatoria.

La presencia en la citación del meta Vicente Guaita es una incógnita. Hace dos jornadas no jugó ante el Atlético de Madrid por un problema en una mano que coincidió con su posible salida a la Premier League. Después, contra el Málaga, tampoco fue convocado y ahora podría volver a contar con él Bordalás, que decidirá tras el último entrenamiento del mismo viernes. Si finalmente no juega, su puesto lo ocupará el argentino Emiliano Martínez.

El Getafe y el Athletic empataron 2-2 en un duelo intenso, con tres penaltis, uno fallado por Jorge Molina, que acabó con un punto para cada equipo con el que ambos se frenaron en su asalto al cielo europeo.

Los dos equipos llegaron a la cita del Coliseum con buenas sensaciones y con un sueño claro que se podía ver en el horizonte: acabar la temporada viajando por el continente. Separados sólo por un punto y cerca de la sexta posición, Getafe y Athletic protagonizaron una batalla muy intensa.

El técnico José Ángel "Cuco" Ziganda sorprendió sentando en el banquillo a Aritz Aduriz para sacar al campo de Sabin Merino, titular por segunda vez esta temporada. No iba a ser el día de Aduriz, otros iban a ser los protagonistas.

Uno de ellos estaba a destinado a serlo: Iñaki Williams, que está semana renovó su contrato y quería lucirse. Y lo consiguió. Fue un auténtico incordio para el Getafe. El jugador del cuadro vasco comenzó pronto a intimidar al portero argentino Emiliano Martínez, que en los cinco primeros minutos estuvo a punto de recibir el primer tanto de Williams.

Avisó con un disparo ajustado al poste derecho de la portería defendida por Emi, de nuevo titular ante la ausencia en la convocatoria de Vicente Guaita, que una semana más no ha solucionado su futuro en el mercado de invierno.

El segundo aviso sí acabó en gol. Williams enganchó una volea desde el vértice del área grande del Getafe y el balón acabó dentro de la red de la portería del conjunto madrileño. Tal vez Williams intentó un centro, pero le salió un auténtico golazo.

El Getafe no se amilanó, es un equipo guerrero. Es muy difícil ganarle por más de un gol de diferencia. Nunca se rinde y siempre se arremanga para intentar sacar resultados. Así son los equipos de José Bordalás, una losa que se levanta rápido de los golpes.

Y con esa actitud, ocho minutos después del gol de Williams, en el 23, Jorge Molina provocó un penalti que transformó él mismo con maestría. Hizo su quinto tanto en Liga, los mismos que Williams, y el partido comenzó de nuevo.

El duelo continuó muy intenso y así murió la primera parte, que dio paso a una segunda en la que no hubo tiempo para coger aire. De nuevo, el colegiado Jesús Gil Manzano decretó otro penalti, en esta ocasión cometido por Francisco Molinero y que no falló Raúl García.

La colección de penas máximas aumentó tres minutos después, pero en esta ocasión el Getafe no pudo celebrar nada por culpa de Iago Herrerín, que adivinó el lanzamiento de Jorge Molina con una buena mano con la que salvó a su equipo del empate.

Ese error no amilanó a los hombres de Bordalás, que siguieron acosando al Athletic con insistencia hasta conseguir hacer caer a su presa. Después de muchos minutos de dominio absoluto, aunque sin ocasiones clarísimas, apareció Ángel Rodríguez, que salió desde el banquillo para empatar el choque a falta de 16 minutos para el final.

El Athletic, después de hacer un buen partido, parecía querer firmar la paz y volver a Bilbao con un punto de un campo complicado como el Coliseum. Pero su rival quería más. Fue ambicioso y fue a por la victoria. Siguió con la misma intensidad y se lanzó a por la portería de Herrerín.

Sin embargo, la épica no apareció más por el Coliseum. El Getafe, con menos fuelle, quiso y no pudo. Ángel no volvió a acertar en varias ocasiones.

El Athletic, se conformó con lo que tenía y consiguió un empate con el que amplia su racha de partidos sin perder en Liga a 9, mientras que el cuadro de Bordalás sumó un punto que le permite estar cerca de Europa, aunque se puede alejar si Sevilla, Betis y Villarreal ganan sus partidos.