Los cinco cambios, un desafío que divide a los estrategas de la Liga

Quique Setién considera que la posibilidad de hacer más relevos a lo largo de los encuentros perjudicará al Barcelona por su manera de jugar. La razón aducida por el cántabro es que los refrescos adicionales permitirán a los adversarios realizar un mayor despliegue en el último tramo de los envites, que han sido propicios en muchos partidos para que el conjunto azulgrana sacase puntos vitales, aprovechando el cansancio de sus oponentes. «Sabemos que muchos partidos los vamos a resolver en los minutos finales. Si a un rival le das la opción que salgan jugadores frescos en ese tiempo, esa debilidad que se genera con jugadores cansados no se va a producir», resaltó la semana pasada un técnico que reconoció que esa modificación de la normativa también le puede «dar recursos en un momento determinado» a un equipo acostumbrado a madurar los pleitos. «Es una incógnita y veremos cómo va», culminó el preparador.

El Barça ha amarrado ocho triunfos en los veinte últimos minutos de partido en lo que va de curso, la mitad de ellos desde la llegada de Quique Setién al banquillo. Los azulgranas remontaron la eliminatoria de octavos de final de la Copa del Rey ante el Ibiza con dos goles de Antoine Griezmann a partir del minuto 72, el último de ellos ya en el descuento. Y vencieron al Granada, el Betis y la Real Sociedad con tantos logrados cuando esos choques se encaminaban a su final. Pese a ello, el central Clément Lenglet ve la opción de los cinco cambios como algo positivo, aplicando el prisma del futbolista. «Al que le va bien es al jugador porque tenemos once partidos en un mes con calor y muchos viajes y es para protegernos un poco. Al jugador le va bien y con el tiempo veremos si le va bien al Barcelona, pero de momento no lo podemos saber», zanjó.

Sergio González, técnico del Valladolid, considera que la extensión de los cambios a cinco «es buena» por el oxígeno extra a los jugadores pero, a su entender, «provoca desigualdad». «No favorece a los equipos pequeños», afirmó el entrenador catalán en declaraciones a 'El Partidazo de Cope'. Hasta en tres ocasiones ha eludido Sergio González hacer la última sustitución en la presente temporada, y en otras cinco introdujo el último relevo a partir del minuto 89.

La menor profundidad de plantilla se perfila como un hándicap para los equipos modestos y para algunos grandes, como el Barça, que no andan sobrados de efectivos. Los azulgranas sólo cuentan con 18 jugadores del primer equipo más el canterano Ansu Fati, habitual en las convocatorias durante toda la campaña, ya que el francés Ousmane Dembélé fue dado de baja en la Liga por su lesión de larga duración. De ahí parte de la inquietud de Quique Setién en la pelea por el título con el Real Madrid, con 25 miembros en su plantel.

Pero hay otros entrenadores que se muestran encantados de poder intervenir más en los choques. «Tener 23 jugadores disponibles por partido y los cinco cambios me parece una decisión fantástica, para mejorar el físico de los jugadores y tener a toda la plantilla disponible. No sé si va contra la esencia del fútbol, pero como entrenador me parece fantástico», proclamó Javier Aguirre, preparador del Leganés, en un foro del diario Marca.

«Me gusta la medida de los cinco cambios por las posibles lesiones y el calor, pero este tipo de medidas favorecen a los grandes que tienen mejores banquillos», indicó por su parte Pepe Bordalás, timonel del Getafe. Una opinión en la que abundaba Javi Calleja. «Creo que benefician a los equipos grandes. Nos puede venir bien a nosotros porque tenemos una gran plantilla y es lo mejor para todos con este calendario», terció el técnico del Villarreal.