Barça y Atlético hacen un favor al Madrid

Los barcelonistas no lo olvidan, aunque oficialmente nadie se quejó demasiado entonces porque se consideraba que el campeón era merecido. Quedaba feo quejarse. Ya se fueron los goleadores, Alexis y Godín, pero siguen unos pocos protagonistas de aquellos onces: Piqué, Busquets y Messi, por parte azulgrana, y Simeone y Koke, por la rojiblanca. Sí ha cambiado algo importante: el Real Madrid esta vez sí cuenta y podría ser el gran beneficiado. La victoria del Barça o el empate le permitirá depender de sí mismo para conquistar el título si mañana derrota al Sevilla, todavía con opciones al título, a las 21 horas en Valdebebas. Tremendo: Koeman y sus jugadores podrían poner la Liga en bandeja a su odiado rival. Retorcido.

El Atlético, que ganó 1-0 en la primera vuelta en el Wanda Metropolitano, parte con más ventaja de la que indican los puntos (76-74). El Barça, tras un inicio de temporada horrible en el que muchos le veían peleando de forma apurada por una plaza en Europa, lo dio todo para llegar vivo a este tramo final de Liga, ganando incluso la Copa, pero a costa de dejarse muchas fuerzas por el camino. Su fiabilidad ante los grandes en este curso es más que discutible (derrotas ante el Real Madrid, dos, Atlético, PSG y Juventus) y se enfrenta a un equipo de Simeone también desgastado, pero más preparado para combatir la presión de defender el primer puesto. El Barça ya desperdició hace una semana la oportunidad de depender de sí mismo, pero cedió en el Camp Nou ante el Granada (1-2) de forma incomprensible. La herida, pese a la victoria en Valencia (2-3), no está curada.

No estará Ansu Fati, operado el jueves en Oporto por segunda vez del menisco de la rodilla izquierda (versión oficial), aunque algunas fuentes hablan ya de cuatro intervenciones con las dos que se le realizaron de forma clandestina. En cualquier caso, hasta la próxima pretemporada ya no se le espera. Y Coutinho, operado también de la rodilla en Brasil, es la otra baja de larga duración. Por contra, vuelve a la lista Braithwaite, pero con escasas opciones de ser titular en un once con pocas dudas: Mingueza o Araujo en la línea de tres centrales del 3-5-2 y Sergi Roberto o Dest en el carril derecho. En punta, Messi y Griezman. Ronald Koeman lo verá en un palco, comunicándose mediante el móvil con sus ayudantes, porque tendrá que cumplir su segundo y último partido de sanción por aquello del «vaya personaje» al cuarto árbitro del Barça-Granada.

Mientras, el Atlético visita el Camp Nou con una idea clara: la de asaltar por primera vez el feudo azulgrana con Simeone en el banquillo colchonero. Hasta la fecha, el argentino dirigió a su equipo allí en trece ocasiones -ocho en Liga, dos en Champions, dos en la Copa del Rey y uno en la Supercopa de España- con un balance global de seis empates y siete derrotas.

Para el asalto al Camp Nou, Simeone cuenta con toda su plantilla a disposición y sigue manejando su ya tradicional defensa con tres centrales -Savic, Giménez y Hermoso- y dos carrileros -Trippier y Carrasco-, con muchas posibilidades para Kondogbia en la posición de mediocentro después de su gran actuación en Elche. El futbolista centroafricano estaría acompañado por Koke y Lemar en los perfiles interiores, con los dos pilares ofensivos rojiblancos esta temporada, Llorente y Luis Suárez, en la vanguardia, y futbolistas como Joao Félix o Correa partiendo desde el banquillo.

El Real Madrid salió

Acusado con frecuencia –y con razón– de conservador, esta vez Simeone optó por uno de los onces más

Otra circunstancia. a la media hora de juego, volcó el partido hacia los intereses rojiblancos. Fue la baja de Busquets, conmocionado por un cabezazo fortuito de Savic en un choque aéreo. Hasta ese momento el Atlético había avisado con un tiro mordido de Lemar –que también tuvo que ser sustituido por lesión– y una llegada por la izquierda de Hermoso en la que Lenglet le rebañó el balón desde el suelo a Correa cuando el argentino solo tenía que empujarlo a gol. Pero fue tras el cambio de Busquets por Ilaix Moriba cuando el líder se acercó de verdad al 0-1 liderado por

También apareció la

El dominio rojiblanco continuó tras el descanso, aunque sin verdadero peligro. Poco a poco, el Barcelona se fue metiendo en el encuentro a través de

Simeone buscó

El cansancio

Sin goles, el empate