Kroos-Ramos, sociedad letal a balón parado

A los tres triunfos decididos por la cabeza del capitán madridista tras córners lanzados por Kroos hay que añadir la final de la 'décima' en Lisboa (entonces tras un saque de esquina botado por Modric), la del Mundial de clubes de 2014, la de la Supercopa de Europa de 2016 (para forzar la prórroga, a pase de Lucas Vázquez) y el empate en el Camp Nou (1-1 en el minuto 90, después de una falta dirigida por el croata) en la primera vuelta de la presente Liga. En la mayoría de los casos, con asistencias de Kroos para que, con fe y corazón y, a través del juego aéreo, el Real Madrid se mantenga en la defensa de la Copa de Europa tras el doblete del sevillano al Nápoles y vuelva a ser líder y gran favorito al título de Liga.

«En las acciones a balón parado sabemos que estamos fuertes, pero me gustaría meter más goles en acción de juego», reconoció Zinedine Zidane tras la victoria ante el Betis, rodeada de nuevo de polémica por la expulsión que Mateu Lahoz perdonó a Keylor Navas, que en la última jugada fue salvador con «el paradón del siglo», según lo definió el propio Sergio Ramos. El capitán del Madrid también reclamó mejor fútbol de su equipo, que cuando se atasca y se desordena queda a expensas de la épica y de su cabeza, lo que supone un riesgo innegable para un equipo que ni juega ni sabe a qué juega y ahora también acusa la pérdida de velocidad y desborde de Cristiano Ronaldo y la pegada del crack portugués.

«En el fútbol jugar bien o mal a veces no importa, pero tenemos que acostumbrarnos a jugar un poco mejor», proclamó Sergio Ramos, insatisfecho con el fútbol del Madrid, aunque «orgulloso» de resultar de nuevo resolutivo tras un saque de esquina ejecutado por Kroos. El defensa andaluz ha marcado 10 goles en una misma temporada por primera vez en su carrera y es el futbolista que más tantos ha conseguido esta campaña con la cabeza en todas las competiciones. Mientras, su mejor aliado, Kroos, ya es el máximo asistente de la Liga, con diez pases de gol, siete de ellos a balon parado al sevillano y media docena rematados por la testa del de Camas. Así ocurrió recientemente en San Paolo para dar la vuelta al partido ante el Nápoles con sendos cabezazos, y en tres ocasiones ya en el Bernabéu, donde el Madrid también echa en falta «más cariño» de la afición. Y el equipo está jugando con fuego dentro y fuera de casa, porque ya son cuatro partidos de Liga los que ha tenido que remontar esta temporada el Madrid: Alavés (del 1-0 al 1-4), Deportivo (del 1-2 al 3-2), Villarreal (del 2-0 al 2-3) y Betis (del 0-1 al 2-1).