Jesé roza la gesta

El 'Bichito' fue mucho más que el 'Bicho' durante gran parte del encuentro, desaparecido Cristiano Ronaldo hasta el arreón final en medio de la marea canaria que barrió el césped de la 'casa blanca'. No marcó el canario, a quien Keylor Navas negó la condición de protagonista que reclamó hasta en tres ocasiones, pero brilló en su retorno al campo que tiempo atrás se rindió a su velocidad, capacidad de desborde y remate letal. Poco queda hoy de aquellas condiciones, perdidas a consecuencia de una entrada de Kolasinac que destronó a quien estaba llamado a ser el heredero de Cristiano Ronaldo, pero su carácter indomable le impulsa a intentar recuperarlas.

Acudió a la cita del Jesé con el gol entre ceja y ceja. No hubo ese recibimiento espectacular que tanto anhelaba. Con el estadio a medio llenar, la intensidad de los aplausos se elevaban unos decibelios cuando se cantaba su nombre en la alineación dispuesta por Quique Setién. La mayor parte, eso sí, procedente de la zona en la que se ubicaban los aficionados del equipo insular. Entre el público merengue, indiferencia.

Acostado en la banda izquierda, su primera intervención llegaba cumplido el primer minuto cuando acudió a un balón dividido por el que también peleaba Isco. Enfrente, un viejo conocido de 'La Fábrica', Dani Carvajal. No le perdía ojo el lateral diestro del Real Madrid, contenido a la hora de subir por el carril como acostumbra. Le tocaba ser perro de prensa esta vez de su excompañero, con el que marcó terreno rebasado el minuto 12 mediante una entrada en el mediocampo.

Un par de minutos después gozaba Jesé de su primera ocasión con un disparo que se marchó a córner. Por una vez, Carvajal le había perdido la pista. No se despistó el internacional español en el 18, ganándole un mano a mano en el que Jesé reclamó derribo dentro del área. Las innumerables horas compartidas desde aquellos tiempos en 'La Fábrica' dejaba su impronta en uno de los duelos de la noche. Carvajal le tenía bien calado, y por eso siempre le ofrecía la salida por fuera. No quería dar opción al recorte para que ensayase el insular su disparo. Se resarció Jesé en el 29 en una de esas jugadas que contribuyeron a situarle como una de las grandes esperanzas del fútbol español. Recogió el balón en tres cuartos de campo y dejó por los suelos a Carvajal con su arrancada, sirviendo un balón a Boateng que no encontró puerta.

Adelantaba líneas Las Palmas y se animaba Jesé, que venía de completar ante la Real Sociedad su mejor encuentro con la camiseta amarilla pese a no conseguir romper su sequía goleadora. El desquiciamiento del Madrid tras la expulsión de Bale al poco de comenzar la segunda parte calentaba la sangre del '10' canario, que probaba los reflejos de Keylor Navas con un disparo que repelió el arquero costarricense. Para ese entonces reflejaba ya el marcador el 1-2 y se mascaba la tragedia. El Madrid se había ido del partido, con la BBC desaparecida en combate: Benzema cumpliendo penitencia en el banquillo por su sequía goleadora, Bale expulsado tras perder los papeles con Jonathan Viera y Cristiano Ronaldo negado en las escasas ocasiones en que tomó contacto con el esférico. Arremetía el Bernabéu contra Keylor Navas por su fallo en la jugada que significó el tercero de Las Palmas y Jesé volvía a exigirle en el 16 con un chut que pudo representar el cuarto de no haber respondido el tico. Acabó marchándose sin marcar, pero siempre podrá decir que cinco partidos después de enfundarse por primera vez la zamarra amarilla, contribuyó a un encuentro que a punto estuvo de ser histórico para Las Palmas.