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Amador Gómez
Miércoles, 12 de agosto 2015, 17:27
Dos meses después de que Sergio Ramos se plantease marcharse este mismo verano del Real Madrid en el caso de que el club no le renovase de forma inmediata, el defensa sevillano llegó por fin este miércoles a un acuerdo definitivo con el club para ... ampliar y mejorar su contrato hasta 2020, con un sueldo de 10 millones de euros netos anuales. Tras la despedida de Iker Casillas, Florentino Pérez no podía dejar escapar a Sergio Ramos y ambas partes, condenadas a entenderse, escenificarán la próxima semana en el Santiago Bernabéu, seguramente el lunes, la renovación del ahora primer capitán madridista. Será por tres temporadas más, porque Ramos cumplía contrato en 2017, y casi con el doble de salario, ya que actualmente percibía 5,5 millones por campaña.
Han tenido que transcurrir dos años y medio para que las negociaciones entre Sergio Ramos y el Real Madrid, hasta el pasado mes de julio estancadas, hayan fructificado. Para bien del futbolista, que se convertirá en el segundo mejor pagado de la plantilla, sólo superado por Cristiano Ronaldo, y continuará hasta los 34 años; del Real Madrid, que se garantiza al considerado mejor central del mundo durante un lustro más; y también de Florentino Pérez, obligado a ceder y atender a los deseos de Ramos para evitar que se acrecentase la ira de la afición tras empujar a Casillas a la salida.
Sergio Ramos no quería abandonar el Real Madrid, al que llegó hace un decenio de la mano de Florentino Pérez, pero su desencuentro con el presidente, quien le había prometido la renovación, con una importante mejora, tras el gol que valió la décima, le llevaron a presionar y a pensar en aceptar una oferta del Manchester United de más de ocho millones de euros por temporada. Algunas fuentes incluso aseguran que la propuesta del United era de once millones limpios anuales, por cinco años. Sergio Ramos llegó a ser acusado de «traidor» en Inglaterra, igual que en el Real Madrid se le intentó colgar el cartel de «pesetero» por pretender cobrar al menos tanto como Bale, Benzema o su amigo Casillas (7,5 millones).
Pese al desencuentro entre Sergio Ramos y Florentino Pérez, las negociaciones para la renovación, que comenzaron a principios de 2013, estaban destinadas a una reunión decisiva entre el jugador y el presidente durante la gira de pretemporada por China, en la que se alcanzase un pacto que era obligado. En las conversaciones también participaron el hermano y representante del futbolista, René Ramos, y el director general de la entidad merengue, José Ángel Sánchez, que fue quien este miércoles cerró en Valdebebas el esperado acuerdo con el ídolo y estantarte del madridismo.
«Los que marcan goles ganan pasta», justificó Sergio Ramos para reclamar su aumento de sueldo después de la final del Mundial de Clubes en Marruecos, en la que otro gol de cabeza suyo también fue decisivo para conquistar el título tras su memorable testarazo del 24 de mayo en Lisboa. El Real Madrid, que en principio ofrecía a Ramos sólo 6,5 millones por temporada, aunque después subió a 7,5, comenzó a filtrar que el sevillano no se iba a conformar con menos de diez millones por año para renovar. Será cantidad que cobrará a partir de ahora el central que en 2005 le costó a Florentino 27 millones, ya amortizados con creces.
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