Piqué vuelve a girar los focos en él

Sin lugar a dudas el central catalán es un jugador polémico y la dedicatoria a KR se une a sus gestos dentro y fuera del campo, como su famoso incidente con la Guardia Urbana y algún que otro festejo subido de tono. Su última perla tuvo lugar tras ganar la quinta Champions en la historia del Barça, cuando Piqué no dudó en mencionar durante la celebración del título al cantante colombiano Kevin Roldán que actuó en una fiesta de cumpleaños de Cristiano Ronaldo que trajo mucha polémica a principios de 2015, justo cuando el conjunto blanco cayó derrotado por 4-0 en el Vicente Calderón y etapa en la que empezaron a sembrar dudas sobre su juego y resultados.

Pero quizás poco recuerden cuando el defensa escupió a Pedro Cortés, delegado de la selección española, tras ganar el Mundial de Sudáfrica de 2010. El cuerpo técnico y los jugadores estaban celebrando el histórico título en un autobús que recorría las calles de Madrid, cuando las cámaras de televisión pillaron al central lanzando un escupitajo, en forma de gamberrada, a Cortés. Sin embargo, una de sus acciones más sonadas fue la famosa manita que dedicó al Real Madrid. Tras anotar Jeffren el quinto y definitivo gol, Piqué no dudó en alzar la mano a la grada del Camp Nou señalando el resultado que el Barça acababa de endosar al eterno rival.

Polémica con Arbeloa

Por otro lado, en abril de 2011, el defensa azulgrana, que ha generado muchas polémicas en las redes sociales, también dejó una anécdota para la historia. Tras empatar a uno en el Santiago Bernabéu en un partido de Liga, en el túnel de vestuarios Gerard se encaró con los jugadores del Real Madrid y gritó, según contaron después sus compañeros de selección: «¡A ocho puntos, a ocho puntos! ¡Españolitos ya os hemos ganado vuestra liga española, y ahora os ganaremos la Copa de vuestro Rey!». Aunque no le salió bien la jugada ya que el Madrid levantó el título de Copa en Mestalla justo cuatro días después. También en Chamartín, durante un partido de Copa disputado en enero de 2013, Piqué dio que hablar tras recoger un mechero que se lanzó desde las gradas del Bernabéu. El defensa culé quiso enseñárselo al árbitro pero Carles Puyol se lo quitó y lo tiró fuera del campo, a la vez que recriminaba a su compañero en la zaga que se centrara en jugar.

«Viendo una película de humor por el Canal + Liga... ¡Siempre va bien a estas horas de la noche!». Este mensaje cargado de ironía de Piqué reflejó su enfado por el desenlace del Elche-Real Madrid en septiembre de 2013. El jugador del Barça mostró en las redes sociales su desacuerdo con un penalti pitado a favor del conjunto merengue, que transformó Cristiano Ronaldo y que otorgó los tres puntos a los madrileños. «¡Me alegro de que algunos cambien el teatro por el cine, eso siempre está bien!», le contestó Álvaro Arbeloa, con quien no tenía relación alguna, pocas horas después.

Luego no coincidieron en el Mundial, en el que Piqué fue suplente en el segundo partido tras un primer encuentro desafortunado ante Holanda y alegó estar lesionado antes del partido, intrascendente, ante Australia; que siguió tomando el sol en el banquillo. Ello, y su mala actitud durante una concentración en la que se le vio junto a Shakira pese a que no estaba permitido, le costó no ser citado con la selección en los primeros duelos tras la debacle mundialista. Se habló de que estaba tocado, aunque jugó sin problemas frente al Villarreal. Y es que esta campaña ya comenzó fuerte, porque en plena pretemporada lanzó dos bombas fétidas a personas que estaba junto a la expedición del Barcelona. Primero a las azafatas del avión que trasladaba a la expedición a Finlandia, y un día después a los periodistas, que estaban esperando la comparecencia de Luis Enrique tras el partido en la zona mixta. Días después, el 11 de septiembre, subió una foto en la Diada de su hijo con la camiseta cuatribarrada del Barcelona.

Con el móvil en el banquillo

Sin embargo, el incidente público, y no deportivo, más controvertido del futbolista se produjo en Barcelona, en la madrugada de un martes en 2014. La Guardia Urbana multó al coche del hermano del jugador por estar aparcado en el carril bus a las puertas de una discoteca. Algo que no sentó nada bien al central, que fue denunciado por una actitud irrespetuosa y desobediencia leve a la autoridad al increpar a los agentes. El jugador, que acababa de regresar de Luxemburgo tras un duelo con la selección en el avión privado junto a Shakira, abroncó a los policías con frases como «me tenéis envidia porque soy famoso», «me estáis multando porque vais a comisión», «esta denuncia va a quedar en nada porque llamo a tu capo y me la quita», «voy a hablar con tus jefes y se te va a caer el pelo», «sois unos chulos y os creéis los amos del mundo por llevar ese uniforme y multar a la gente», «esta multa la va a pagar tu padre», «me da asco vuestro trabajo y la Guardia Urbana es una puta vergüenza». Eso sí, Piqué supo reaccionar y se disculpó: «Lo siento, me he equivocado y no volverá a ocurrir», recordando la célebre frase realizada por Juan Carlos I tras su incidente en Bostwana.

Ello sucedió unas semanas antes de que en plena disputa de la Supercopa de Catalunya ante el Espanyol fue cazado por las cámaras mirando el móvil, que lo llevaba en el chándal, estando en el banquillo. Eso supuso que Luis Enrique, justo después, no le convocase para un partido de Liga ante el Celta en el Camp Nou. Los casos extradeportivos afectaron mucho la trayectoria. A partir de ahí paso tres partidos en el banquillo, vuelvo de la convocatoria de mediados de noviembre con la selección y ahí ya todo va sobre ruedas. Siempre he intentado ser yo mismo, soy el que pienso y no cambiará nunca. A veces he sido demasiado directo y otras veces quizá he dicho y he hecho cosas que no debía. La experiencia te da un grado de frenarte un poco más. Hay veces en las que hay que dar la cara y otras estar más al margen, ahora prefiero estar más al margen, no estar tanto en los medios». Curiosa reflexión, porque tras conseguir el triplete primero avisó que iba a irse de fiesta ante los medios y después subió varios vídeos en sus redes sociales celebrando con su pareja y sus amigos en los que se les veía muy deshinibidos.