Iniesta emociona a Xavi

Le queda un entrenamiento en la Ciutat Esportiva, otro en el Estadio Olímpico de Berlín y la final de la Liga de Campeones ante la Juventus, donde podría dejar su récord en 767 partidos oficiales como azulgrana y 25 títulos como culé. Ahora sí que Xavi toca con las manos el adiós al club de su vida y es más consciente todavía del paso que ha dado. En el Auditori 1899, anexo al Camp Nou, el escenario con mayor capacidad para los eventos más relevantes, se reunió una amplia representación de su entorno para despedirle: su mujer, Nuria, que espera el primer hijo de la pareja, sus padres, hermanos, familiares directos, compañeros actuales, excompañeros con los que mantiene más contacto como Gabri, Puyol o Ezquerro, amigos de la infancia de Terrassa que siguen formando parte de su vida, la Quinta de Troya compuesta por los jugadores con los que comenzó en el fútbol base azulgrana, presidente y expresidentes, directivos, entrenadores, periodistas con los que ha estrechazo lazos después de tanto tiempo, Villar, Zubizarreta Sólo faltaron Messi, Piqué, Rakitic, Ter Stegen y Rafinha porque los encargados de los controles de dopaje de la UEFA se presentaron en la Ciutat Esportiva por sorpresa y no pudieron acudir. El argentino lo lamentó en las redes sociales.

Habló Josep Maria Bartomeu como introducción en presencia de Joan Laporta, que creó misterio de cara a su posible presentación a las elecciones la próxima semana. Loó la figura de Xavi y le recordó que se va «para volver», pero fue el texto de Iniesta el que emocionó al egarense, ya nervioso al ver a tanta gente querida en el aforo: «Xavii, capitán, compañero, amigo, máquina. Me toca hablar en nombre de los que hemos vivido todas estas experiencias contigo. Quién diría que estaríamos aquí. Tú, que has estado 17 años en el póster del primer equipo, siempre en la fila de abajo. Eso tiene mucho mérito y además, como tú nos recordabas, en el club más exigente del mundo. Es difícil imaginar que en el primer entrenamiento de la próxima temporada no estés. Tú, que has recibido siempre a los nuevos y les has hablado de lo que representa defender este escudo. Gracias por transmitir estos valores, por tus consejos que son auténticas lecciones de vida y de fútbol. Cuántas veces has explicado a los jóvenes que ahora lo normal es ganar, pero que veníamos de abajo. Has vestido más veces que nadie la camiseta del Barça, con pasión y amor. Eres tan culé que todos sabemos que volverás». Xavi tuvo que echar mano ya del pañuelo cuando el de Fuentealbilla le recordó a su abuelo Jaume, «más culé que el palo de la bandera, lo feliz que estaría ahora». Y cerró: «Quiero darte las gracias por todos estos años. Gracias por el día a día, por las charlas que no son del fútbol, por la relación maestro-alumno. Ha sido un privilegio estar a tu lado. Eres muy grande. Gracias Xavi por todo lo que has dado y lo que darás. Siempre nos acompañarás, amigo».

«Abre los ojos, estás en el Barça»

Tras la ovación, habló Xavi, haciendo un esfuerzo por serenarse: «Muchas gracias por estar todos aquí. Me gustaría dar las gracias uno por uno a todos los socios y aficionados del Barça. A todos los que me han hecho llegar su afecto y me han pedido que me quede. Y gracias sobre todo al Barça. Sólo tenía 11 años y vine de Terrassa. Ni en el mejor de mis sueños podía imaginar lo que he vivido aquí». Hizo un repaso de técnicos, desde el primero en el club, Asensi, hasta el último en el Barça, Luis Enrique, o en la selección, Del Bosque, deteniéndose con especial cariño en Joan Vilà («Soy lo que soy gracias a ti; fuiste mi entrenador durante cuatro años, me lo enseñaste todo, los movimientos como futbolista, gracias»), Van Gaal, Rijkaard, Guardiola, Luis Aragonés («Nunca le podré agradecer todo lo que hizo por mí») y Tito Vilanova («Un padre futbolístico para mí»).

Se dirigió a su madre, Maria Mercè, para agradecerle que liderara la oposición familiar a su marcha del Barça rumbo al extranjero hace años hasta el punto de plantarse y salirse con la suya. Y a su padre, Joaquim, le recordó la frase que tantas veces le dijo de niño cuando Xavi dudaba: «Abre los ojos, estás en el Barça. Este tren sólo pasa una vez en la vida». Y, por supuesto, se despidió con el mensaje que todos los barcelonistas querían escuchar: «Antes de irme espero levantar otra Champions en Berlín. Espero que esto no sea un adiós, sino un hasta pronto». Y es que todo el mundo sabe que un barcelonista tan fiel volverá, como entrenador o como director deportivo. Seguro que como socio, pero volverá.