Tres presuntos autores de la muerte del ultra de Riazor Blues, a la cárcel

El magistrado titular del juzgado número 20 de Madrid, que instruye la causa de la denominada operación Neptuno, acordó ayer la prisión provisional comunicada y sin fianza de los tres ultras supuestamente relacionados directamente con la agresión mortal del hincha del Deportivo que fue arrojado al Manzanares.

Entre los 34 detenidos que pasaron este jueves a disposición judicial, 30 fueron puestos en libertad con cargos, imputados de participación de riña tumultuaria y desórdenes públicos, con la medida cautelar de comparecer dos veces al mes ante el juzgado, así como la prohibición de acercarse a menos de un kilómetro del Vicente Calderón y de acudir a cualquier partido que dispute, oficial o amistoso, el Atlético de Madrid, tanto dentro como fuera de España. El último detenido quedó en libertad, sin ninguna medida cautelar.

Respecto de los primeros 21 detenidos que quedaron en libertad el pasado 2 de diciembre, acusados de riña tumultuaria, su situación está pendiente de la resolución del recurso de apelación que ha presentado la Fiscalía de Madrid ante la Audiencia Provincial -el Ministerio Fiscal solicita también su ingreso en prisión-, en lugar de hacerlo en reforma ante el juzgado competente, el de Instrucción número 20. Las diligencias de la investigación continúan secretas.

Horas antes de que la justicia decretase el ingreso en prisión de los tres principales sospechosos de matar a Jimmy, la Policía detuvo por la mañana en La Coruña a 18 ultras de los Riazor Blues por su participación en la reyerta del 30 de noviembre contra radicales del Frente Atlético. Por tanto, ya son 80 los individuos arrestados, de entre los más de 200 ultras implicados en la batalla campal en las inmediaciones del Vicente Calderón. La mayoría de ellos son miembros del Frente Atlético (41), pero la cifra de detenidos de los Riazor Blues asciende ya a 34, que se suman a otros cuatro de Ultra Boys del Sporting y uno más relacionado con los Bukaneros del Rayo y con los Alkor Hooligans de Alcorcón.

El mismo día de la pelea a orillas del Manzanares fueron detenidos 21 radicales, pero la operación Neptuno llevada a cabo por la Policía Nacional en Madrid capital y provincia, Toledo, Ávila, Cuenca, Gijón y La Coruña, ha dado ya como resultado, durante tres días, que se haya identificado y arrestado por el momento a otros 59 ultras, tres de los cuales ya han acabado en la cárcel. Supuestamente, fueron quienes agredieron mortalmente a Jimmy y le arrojaron al río tras ser apaleado.

Para proceder a la detención de 18 integrantes de Riazor Blues, los agentes de la Brigada de Información de Madrid desplazados hace unos días a La Coruña han contado con la colaboración de efectivos de la Jefatura Superior de Policía de Galicia y antidisturbios con sede en esta provincia. Todos ellos están acusados de riña tumultuaria, además de tenencia ilícita de armas u otros objetos contundentes. Durante el enfrentamiento entre violentos del Atlético de Madrid y del Deportivo los ultras recurrieron a navajas, palos, barras metálicas y bengalas, y el ultra del Deportivo fue golpeado con una barra de hierro en la cabeza y en el bazo antes de ser lanzado al Manzanares.

Para ayudar a los integrantes del Frente Atlético contra los de Riazor Blues, los radicales colchoneros contaron con el apoyo de, al menos, cuatro miembros de Ultra Boys, también de extrema derecha. Por su parte, los hinchas del Deportivo, de extrema izquierda, hermanados con los Alkor Hooligans, tuvieron, como mínimo, el respaldo de un ultra del Alcorcón también relacionado con los Bukaneros. Por tanto, están supuestamente involucrados en la reyerta integrantes de hasta cinco grupos violentos del fútbol español.