El Athletic certifica su pase a la Europa League

Fue un triunfo casi increíble y después de una inesperada remontada en seis minutos -del 68 al 74- al 2-0 con el que se había adelantado con merecimiento el equipo griego a la hora del partido.

Pero Iker Muniain se enrabietó, Aritz Aduriz sacó a relucir su imponente pegada y el conjunto griego se vino abajo tras el primer golpe. Y todo apunta a que de manera definitiva.

A pesar de la clara ventaja que le da el resultado, el Athletic deberá esforzarse en mejorar el juego que está mostrando en el arranque de temporada del nuevo proyecto encabezado en el banquillo por el Cuco Ziganda.

Aunque también es verdad que no en muchas de la numerosas previas que ha tenido que encarar anteriormente en los últimos años, hasta ahora todas con éxito, en las que se haya visto tan por delante como en las dos que lleva este curso. En el que ya eliminó al Dínamo de Bucarest por un tanteo global de 4-1 (1-1 y 3-0).

Para mañana José Ángel Ziganda sufre las bajas de Yeray Álvarez y Oscar de Marcos, quien se lesionó en un tobillo ante el Getafe y estará varias semanas fuera del equipo, y tampoco cuenta ya con Asier Villaibre, cedido al Valladolid.

Por contra, Cuco puede recuperar a Ander Iturraspe, ya trabajando con normalidad una vez superada la lesión muscular sufrida en pretemporada.

En la alineación es seguro el regreso entre palos de Iago Herrerín, meta titular en las competiciones de Copa, y probable también que vuelvan al once Aritz Aduriz y Mikel Vesga, a los que el técnico dio descanso de inicio el domingo ante el Getafe.

La duda es si el técnico mantendrá al joven Unai Núñez, debutante el domingo, junto a Aymeric Laporte en el centro de la defensa, volverá a confiar en un Xabi Etxeita que no estuvo muy bien en el Apostolos Nikolaidis o incluso se decide por Eneko Bóveda para ese puesto de central derecho.

Por lo demás, se espera a Iñigo Lekue, sustituto de De Marcos, y Mikel Balenziaga en los laterales; Beñat Etxebarria al mando del juego en medio campo; y a Iñaki Williams, Raúl García e Iker Muniain en ataque junto a Aduriz.

El Panathinaikos, por su parte, llega a Bilbao sin la compañía de ningún aficionado y con el disgusto añadido al 2-3 de la ida de no haber podido ganar tampoco al modesto Plantanias el domingo en la primera jornada de la liga griega.

En ese partido marcó el tanto de los de Marinos Ouzounidis el argentino Andrés Chávez, recién llegado del Boca Júniors y quien podría ser una de las novedades en la alineación griega o salir, como el domingo, durante el choque.

Habrá que ver también si está disponible el defensa franco-maliense Ousmane Coulibaly, quien no pudo jugar por lesión en la ida y tampoco lo hizo ante el Platanias.

En este último partido jugaron de laterales el sueco Mattias Johansson y el griego Dimitris Kolovetsios en lugar del portugués Nuno Reis y el también sueco Niklas Hult, quienes se vieron implicados en los goles del Athletic el jueves pasado.

Entre los jugadores importantes de los de Ouzounidis están el ariete sueco-uruguayo Guillermo Molins, el capitán Zeca, que marca el juego y los tiempos del equipo verde, y el delantero brasileño ex del Leganés Luciano Neves, que le dio muchos problemas al Athletic en la ida tras salir al inicio de la segunda parte.

Alineaciones probables:

Athletic: Iago Herrerín; Lekue, Núñez, Laporte, Balenziaga; Beñat, Vesga: Williams, Raúl García, Muniain; y Aduriz.

Panathinaikos: Vlachodimos; Johansson, Koutroumbis, Rodrigo Moledo, Kolovetsios; Bryan Cabezas, Zeca, Kourbelis, Lod; Luciano y Guillermo Molins.

Árbitro Benoit Bastien (FRA).

Campo: San Mamés.

Hora: 20:45.

El

Como en el primer partido, en el que el Athletic se impuso por 2-3, el equipo del

Tras el tanto, siguió la misma tónica. Los locales dominaban el partido mientras el Panathinaikos intentaba aprovechar las mínimas oportunidades que le concedían. Así se encontró con un lanzamiento al poste, que no pareció asustar en exceso al equipo bilbaíno, que continuó con la seguridad de quien tiene bien encarrilada la eliminatoria.

En el segundo tiempo el Athletic se empezó encontrando todavía más cómodo. O controlaba el esférico, o salía velozmente al contragolpe, donde desaprovechó varias oportunidades que ya ningún aficionado lamentará. Por su parte, el conjunto griego lo intentó mediante tímidos contraataques, tras recuperar el balón ante las rápidas salidas de los locales, que acababan en centros que caían mansos en las manos del guardameta vasco o en lanzamientos que derivaban en saque de puerta.

A partir del minuto 65, la gran actuación de