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El Borussia Dortmund es el cuartofinalista de la Champions con menos pedigrí por mucho que el club germano presuma de tener una 'orejona' en sus vitrinas (la conquistó en 1997 tras pasar por encima de la Juventus en la final disputada en el Olímpico ... de Múnich), pero ni mucho menos se trata de una perita en dulce. En realidad se puede decir que el equipo que entrena Edin Terzic es más bien un tapado con cuajo, atendiendo, al menos, a lo que sucedió en la fase de grupos de la presente edición de la máxima competición continental.
Encuadrado en el denominado 'grupo de la muerte' junto al PSG, el Milan y el Newcastle, el conjunto renano pasó a octavos como primero tras cosechar once puntos, tres más que el PSG. Cayó en la primera jornada en el Parque de los Príncipes (2-0) y empató en la segunda fecha ante el Milan (0-0). Pero el triunfo en el estadio del Newcastle (0-1) representó un punto de inflexión para un equipo que hizo los deberes en la segunda vuelta derrotando de nuevo a las 'urracas', esta vez en el Signal Iduna Park (2-0) e imponiéndose luego al Milan en San Siro (1-3).
El empate en la última jornada ante el PSG (1-1) abrochó la buena actuación de los pupilos de Terzic rumbo a unos octavos de final en los que apearon al PSV igualando a uno en Eindhoven y cantando victoria a la vera del famoso Muro Amarillo (2-0).
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Óscar Bellot
Ahora es el Atlético de Madrid el que aparece en el horizonte del Dortmund. La escuadra germana tiene en Europa su principal asidero dentro de una temporada en la que está sufriendo en la Bundesliga. Marcha en cuarta posición con 47 puntos, a 20 del arrollador Bayer Leverkusen y solo uno por encima del Leipzig, su principal amenaza para certificar una nueva presencia en la Champions el próximo año siempre y cuando, claro, no haya una quinta plaza para el fútbol alemán.
De la mano de Terzic, un hombre de la casa que abandonó su condición de técnico interino tras conducir al Dortmund al título en la Copa de Alemania durante la temporada 2020-21 y acarició el pasado año una Bundesliga que se le escapó en la última jornada, el conjunto aurinegro sintió la marcha de Jude Bellingham al Real Madrid, pero tiene mimbres para plantar cara al Atlético.
Su principal punto flaco está en la defensa pese a la presencia de dos centrales tan curtidos como Matts Hummels y Niklas Süle, pero arriba dispone de buenas balas. Su máximo goleador es Donyell Malen, delantero neerlandés formado en la cantera del PSV que recaló en Dortmund en el verano de 2021. Acredita trece tantos en lo que va de campaña, uno más que Füllkrug. Sobresale también la presencia del veterano Marco Reus y de Julian Brandt, seguramente su futbolista con más clase.
Además hay que tener en cuenta el posible efecto de Jadon Sancho, al que los aurinegros volvieron a acoger en enero tras un deslucido paso por el Manchester United con la esperanza de que el británico vuelva a volar tan alto como en su anterior estancia en el conjunto teutón. Por lo pronto, mojó en la vuelta de octavos ante el PSV. Todos estos argumentos, unidos al poder intimidatorio del Muro Amarillo, deben servir para que el Atlético comparezca en el cruce con la guardia bien alta.
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