Golazo de Lewandowski y fútbol control del Bayern

Para seguir engrosando los libros, la escuadra rojiblanca necesita ganar. Otra vez. Lo hizo en Eindhoven, en Rostov del Don y por triplicado en el Calderón, faltaría más, pero en Múnich no será tan sencillo. Básicamente porque el Bayern ha vencido los últimos 14 partidos de Champions que ha jugado en casa, desde que el Real Madrid le humillase (0-4) en su camino a la 'décima', allá por abril de 2014. Entre las 'víctimas' del rodillo bávaro se encuentra el propio Atlético, que la temporada pasada sucumbió 2-1 antes de la final de Milán. Lo dicho, visitar el Allianz no es ningún paseo.

Simeone y su plantilla, que no entienden de imposibles, entrarían en la historia como el segundo equipo en completar una fase de grupos perfecta desde que entró en vigor el formato de competición actual en 2003. Para desgracia del orgullo colchonero, es su vecino 'vikingo' quien estableció el récord, por partida doble además, una con Mourinho y otra con Ancelotti. Ninguno levantó la 'orejona' esa campaña (2011-12 y 2014-15), conviene recordar.

Ambos rotarán

De ganar en Múnich, el Atlético también lograría otro hito, en este caso económico para el club. El pleno de victorias le supondría unos ingresos de 27,7 millones de euros sólo en el primer tramo de Champions, una cifra nunca antes percibida en el Calderón. A saber: 12,7 millones por ser uno de los 32 clasificados, otros 6 por entrar en octavos, y 1,5 más por cada triunfo.

Para enfrentarse al Bayern, Simeone no rotará más de lo estrictamente necesario. Esto quiere decir que Filipe Luis y Tiago, que ni siquiera han viajado, dejarán su sitio a Lucas y Saúl. No conviene forzar a brasileño y portugués a estas alturas de la película, meses antes de las 'escenas calientes' y con problemas físicos a cuestas en las últimas fechas. Sí que estará en el Allianz Fernando Torres, por primera vez en una lista desde el partido ante el PSV.

También moverá el banquillo Carlo Ancelotti, más precavido que obligado, aunque su fondo de armario se lo permite. Seis de los integrantes de su once el pasado sábado podrían quedarse fuera ante el Atlético, y aún así el Bayern seguiría formando con un equipo repleto de cracks: Xabi Alonso, Müller, Robben... Vamos, que un amistoso no va a ser.