Llorente y el City llevan al Sevilla a la Europa League

Jugó la Juventus como sabe desde que llegara a la final de la Champions la temporada pasada. Con las ideas claras del contragolpe y marcar lo antes posible para así no depender de la suerte en los momentos finales del choque. De ahí que el Sevilla se replegara como ya hiciera en Turín, lo que le costó una derrota y las críticas a Unai Emery. Morata y Dubala fueron durante toda la primera mitad un quebradero de cabeza para la zaga sevillista. Ni Rami ni Kolo eran capaces de contener las acometidas de los dos delanteros de la escuadra italiana. Sobre todo el español era el que mejor en forma demostraba estar. Él solo se bastaba para generar ocasiones y sumar puntos a un hipotético KO técnico hispalense lo antes posibles. De las botas del madrileño salió la mejor oportunidad para adelantar a los blanquinegros, pero el ex del Real Madrid no estuvo acertado con la portería vacía.

Mientras los juventinos aclamaban al cielo por fallar una ocasión tras otra, en el bando sevillista todo era desidia y falta de tensión. Las estrellas no brillaban, igual que no han hecho en toda la temporada, y Emery no daba con la tecla correcta una vez más. El empate a cero en el descanso fue la mejor noticia para los hispalenses dentro de la pésima actuación realizada. Tampoco desde Manchester llegaban mejores noticias. El Mönchengladbach remontaba al City y se marchaba de los vestuarios venciendo. Ninguno de los dos resultados le era favorable a los rojiblancos que necesitaban vencer y que no hicieran lo propio los alemanes. Todo estaba saliendo del revés.

Por ello en la segunda mitad Emery decidió apostarlo todo. Si bien el resultado en Inglaterra no dependía de él, sí lo hacía lo que ocurriera al final de los noventa minutos en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Hizo los cambios el vasco buscando el milagro que necesitaba. La afición lo agradeció con una sonora pitada para los jugadores que se marchaban uno a uno y para el propio entrenador, que ha visto tambalearse su proyecto de las dos últimas temporadas mágicas. Pese a las complicaciones, Llorente atisbó su particular salida del túnel y marcó de cabeza tras un córner botado por Konoplyanka. Los dos mejores jugadores del Sevilla se unieron para adelantar a los suyos y confiar que el tanto llegara hasta Manchester y sirviera para alentar las huestes del City frente a los germanos. Los ecos sevillanos se escucharon a miles de kilómetros. Los 'citizens' comenzaron a marcar goles para golear a los alemanes 4-2 ante la alegría sevillista y la desesperación de la Juventus, que veía escapar su primer puesto.

Con Morata desaprovechando oportunidades muy claras en el descuento y la afición agradecida al City, el Sevilla acabó el encuentro con un suspiro de alivio de Emery, al que el destino le da otra bala en la recámara. Toca dar la cara en la Europa League, la 'quinta' es el premio al final del camino.