Iniesta se recupera y Pedro renueva

En las últimas horas el Barça también ha logrado atar a un jugador que se planteaba cambiar de aires a final de temporada, cansado de vivir a la sombra del tridente formado por Messi, Suárez y Neymar. El club anunció la renovación de Pedro hasta 2019. Acababa contrato en 2016. Su cláusula de rescisión seguirá siendo de 150 millones de euros.

El delantero canario, con novias en la Premier League y en la Serie A, mostró su alegría en las redes sociales y firmará en los próximos días, al igual que otro internacional español, Jordi Alba, que renovará hasta 2020. Su cláusula también será de 150 millones. Salvo sorpresa, serán las dos últimas grandes operaciones de Josep Maria Bartomeu como presidente del club antes de convocar elecciones la próxima semana al regreso de Berlín. Son dos renovaciones que algunos criticarán en clave electoral y otros aplaudirán al tratarse de dos jugadores de casa con edad para seguir dando lo mejor al club.

Iniesta, Pedro y Alba, lógicamente, están entre los 26 convocados que viajan a Berlín. Luis Enrique se lleva a toda la plantilla, 23 jugadores del primer equipo (están todos disponibles), y los tres del filial que han tenido minutos en la competición esta temporada: Munir, Sandro y Sergi Samper. Los tres reciben un premio inesperado en una temporada en la que han descendido a Segunda B. Todos se entrenarán este viernes por la tarde en el Estadio Olímpico de Berlín y Luis Enrique facilitará la lista de 18 convocados el sábado, pocas horas antes del partido. No hay dudas sobre el equipo inicial: Ter Stegen, Alves, Piqué, Mascherano, Alba, Rakitic, Busquets, Iniesta, Messi, Luis Suárez y Neymar. Y en el banquillo son seguros Bravo, Mathieu, Xavi y Pedro, el cambio por línea más habitual.

En el estadio estará Figo, pero no en el partido de veteranos que organizó la UEFA por su cuenta para antes del encuentro entre exjugadores de ambos equipos. La noticia de que iba a jugarlo con la camiseta del Barça causó un enorme revuelo entre los seguidores azulgrana, que siguen sin perdonarle su fichaje por el Madrid en el año 2000. Tampoco se olvida su labor intimidatoria en el banquillo del Inter como vocero de Mourinho hacia Benquerença, árbitro compatriota de ambos que decidió la ida de la semifinal 2010. El FC Barcelona tuvo que avisar a la UEFA del error que estaba cometiendo y recibió la respuesta de que Figo no iba a jugar finalmente.

Johan Cruyff criticó la actitud del club en este caso, demostrando una vez más que vive en un mundo muy alejado del barcelonista de la calle que tanto le escucha. También dijo en su día que era un error fichar a Neymar porque dos gallos, en referencia a Messi, no cabían en el mismo gallinero. El brasileño y el argentino, con una gran química entre ambos, intentarán el sábado ganar la Liga de Campeones y puede que hasta Cruyff se alegre.