Lopetegui pone contra las cuerdas a Guardiola

El Oporto es el único equipo invicto en la Champions y Lopetegui es ya el segundo técnico español, tras Rafa Benítez (con el Valencia en la temporada 2002-2003), que no ha conocido la derrota en ninguno de sus nueve primeros partidos en su estreno. De momento, el equipo luso, que accedió desde la ronda previa tras superar dos veces al Lille, suma seis triunfos y tres empates, con una fórmula de éxito basada en la solidez defensiva, el sacrificio colectivo, la presión asfixiante y la capacidad para explotar al máximo los fallos del rival. En terreno del Oporto los cometieron Xabi Alonso, Dante y Boateng, pero el equipo luso dio una lección de disciplina, despliegue físico e insistencia en robar el balón, aprovechando los regalos en defensa de un Bayern desactivado en el medio campo, siempre atascado en ataque salvo en un par de acciones puntuales, y con Guardiola tan impotente como su equipo «A peor no se puede ir, Pep», se tituló este jueves en la prensa alemana.

No le hizo falta la posesión al Oporto (sólo el 39% frente al 61% del Bayern) para ridiculizar en defensa a un conjunto germano sin concentración y con escaso espíritu. Al equipo luso, que evidenció tener muy estudiado lo que tenía que hacer frente al gran favorito, le sobró sin embargo energía en la contención, pero también fue atrevido, sin necesidad de disponer de la pelota la mayor parte del encuentro, aunque Lopetegui reconozca que la posesión, como la que monopolizaba el Barça de Guardiola, sea un gran arma. «Mientras tengamos el balón, tenemos la oportunidad de atacar y el rival no puede atacarnos. Evidentemente, cuando más posesión tengas, más oportunidades tendrás de ganar el partido, pero en el fútbol no hay matemáticas. En teoría, si un equipo tiene el balón durante todo el partido no puede encajar un gol. En realidad, un equipo con el 20% de posesión puede derrotarte», advertía el entrenador vasco del Oporto, que este año ha tenido que construirse con 16 nuevos, antes del cruce de cuartos contra su admirado Guardiola.

El Oporto, que lleva 24 goles a favor (máximo anotador junto al Bayern) y sólo cinco en contra, es el cuarto equipo que más dispone de la pelota (el 57%), superado por el propio Bayern (63%), el Barça (62%) y la Juventus (58%), y por encima del Real Madrid (56%). Evidentemente, como reconoce Lopetegui, la posesión concede más posibilidades, pero nunca puede garantizar el triunfo. Con un equipo muy limitado, en el que sobresale Jackson Martínez, y ahora también Quaresma, recuperado física y anímicamente por su técnico, el entrenador del Oporto pretende «buscar un equilibrio» con los jugadores de los que dispone, y está consiguiendo que se adapten a su estilo. Pese al 3-1, Lopetegui advierte de que sólo se ha llegado «al descanso de la eliminatoria, queda lo más difícil». Para Múnich, mientras él pierde a sus dos laterales titulares (Danilo y Alex Sandro), Guardiola espera recuperar al menos a Ribéry y Schweinsteiger, pero el primer golpe ya está dado y amenaza con derribar un mito. Pep llegó para ganar la Champions y tras caer ante el Real Madrid el año pasado puede ser este año un excompañero y amigo el que le ponga en apuros.