Dos leyendas del Chelsea frente a frente en la final de los 100 millones en Wembley

Y es que el campeonato inglés tiene un sistema de reparto económico bastante igualitario, que permite que todos reciban cantidades importantes cada año de los contratos de televisión que ha ido firmando desde su creación en 1991. Además, como ha pasado con el Fulham (que ha vuelto a descender) la Premier nutre a los equipos que descienden con 60 millones divididos en tres temporadas. Es decir, si un club baja, recibe el primer año el 55 % del pago igualitario, 45 % el segundo y 20 % el tercero.

Un partido que seguirán millones de ojos puestos en dos leyendas del Chelsea y la selección inglesa, Frank Lampard, técnico del Derby, y John Terry, asistente de Dean Smith. Será la segunda final de los 100 millones para el histórico central inglés. Y es que la campaña pasada los villanos se enfrentaron en Wembley al Fulham en el partido decisivo del play-off de ascenso pero cayeron por un solitario gol de Tom Cairney (1-0).

La derrota del Aston Villa, uno de los históricos grandes ingleses y que logró una 'orejona' en 1982, dejó a Terry sin poder cumplir su sueño de ascender a la Premier League con 37 años. Destituido el entonces técnico, Steve Bruce, que se quedó a las puertas de un quinto ascenso que hubiese sido récord a la máxima categoría, el que fuera capitán del Chelsea pasó a ser ayudante de Dean Smith.

En el club de Birmingham, que el martes eliminó en los penaltis al West Bromwich Albion, el director deportivo es el español Jesús García Pitarch.

Cuando se esperaba que Marcelo Bielsa pudiera volverse a medir a los villanos apenas un mes después de su gesto de fair play en el duelo liguero el Leeds desperdició de modo inesperado el 0-1 de la ida. El Derby County acabó con el sueño del regreso a la Premier League de Marcelo Bielsa tras un partido loco que finalizó con 2-4 y que había empezando dominado el cuadro local con un gol de Stuart Dallas mediada la primera parte.

En apenas quince minutos desperdició su renta de dos goles y aunque Dallas volvió a igualar la eliminatoria en el 62' una expulsión del italiano Bernardi condenó a un Leeds que encajó el cuarto gol en una mala acción defensiva de Cooper y el español Kiko Casilla.

Una decepción para Bielsa, que lamentó no haber logrado «mayores diferencias en el primer tiempo», cuando dispuso de más ocasiones para marcar.

Por su parte, Frank Lampard estaba eufórico e incluso se le pudo ver cantando en el vestuario de los 'carneros'. «Con el 1-0 abajo, les dije a los muchachos que todos nos daban por muertos, que las apuestas estaban 1/8 en contra de nuestra clasificación, que nos habían ganado tres veces (esta temporada)... Pero hicimos un pequeño ajuste táctico y funcionó. En partidos como éste se necesita valentía y los muchachos lo demostraron pero este no es el final y tendremos un partido difícil contra el Villa», añadió el que podría ser nuevo técnico del Chelsea, ya que Maurizio Sarri no tiene garantizada su continuidad ni con el tercer puesto en Premier League.

Habrá que esperar hasta ver lo que sucede en la final de la Europa League en Bakú, donde no podrá estar Ruben Loftus-Check tras lesionarse en un amistoso el miércoles en Boston, en la que los 'blues' se medirán al Arsenal, para saber si el italiano sigue en Stamford Bridge. De no hacerlo 'Lamps' podría volver al Chelsea como primer entrenador para la alegría de una afición que sabe afronta un año complicado por la sanción de la FIFA que le impedirá fichar este verano y el próximo mes de enero.

Lampard es el máximo goleador histórico del Chelsea y fue pieza clave desde 2001 hasta 2014 de tres Premier League, una Champions League, una Europa League, cuatro FA Cup, dos Copas de la Liga y dos Community Shield. El próximo 27 de mayo, a las tres de la tarde en un Wembley abarrotado por 90.000 espectadores, tratará de amargar al que fue su capitán, y amigo, en una tarde que Derby y Villa pelearán por acompañar a Norwich City y al Sheffield United, los dos clubes de Championship que consiguieron el ascenso directo, sabiendo que se llevarán el gran bote: 100 millones de libras.