Guardiola centra la atención política y Wenger culpa a la suerte

El famoso lazo amarillo, que se repartió en los aledaños del estadio por parte de miembros del Comité de Defensa de la República Catalana (CDR) de Londres centró la atención en la rueda de prensa celebrada en Wembley tras la victoria del Manchester City ante el Arsenal por 0-3.

«El lazo amarillo lo llevaré siempre. No solo puedo llevarlo en la solapa, también lo puedo tener conmigo en el bolsillo del pantalón o dentro de la chaqueta. La Federación Inglesa (FA, por sus siglas en inglés) opina diferente de la UEFA; ellos te dejan llevarlo, si es con respeto», manifestó el técnico, a quien la FA le abrió un expediente por mostrar el símbolo político durante partidos oficiales.

«Las normas son las normas y las acepto. (Llevar el lazo) Era algo que tenía que hacer. Cuatro personas llevan 145 días en una cárcel sin haber sido juzgados. Antes de ser entrenador soy ser humano. Hablamos de gente que tiene solo opiniones diferentes y que ha sido acusada de cosas muy graves como sedición y rebelión», añadió el preparador catalán.

Fuera del plano político, Guardiola conquistó el vigésimo segundo título en su carrera como entrenador este domingo y el primero desde que asumió la dirección del Manchester City en julio de 2016.

«Estoy muy contento. No jugamos como solemos jugar, quizá acusamos los nervios y la presión de haber perdido aquí la semifinal del año pasado en la FA Cup (Copa de Inglaterra). En la segunda mitad estuvimos mejor y nos llevamos un título importante», reconoció Guardiola que tiene también prácticamente en el bolsillo el título de campeón de liga, donde aventaja en trece puntos al Manchester United.

Su rival en el banquillo, Arsene Wenger, quien perdió su tercera final de Copa de la Liga y continúa sin saber lo que es levantar este título, aseguró que se quedó con la sensación de que «todo» fue en su contra en el partido.

«Tuvimos una ocasión clarísima en los primeros minutos y luego les regalamos el primer gol. En la segunda mitad tuvimos mala suerte. Jugamos ante un gran equipo, que domina la Premier League y lo está haciendo muy bien en la Liga de Campeones», aclaró el galo.

Además, Wenger explicó que no entendió porque no se utilizó el VAR para revisar el segundo gol del City, marcado por Vincent Kompany, ya que en opinión del francés, «era en fuera de juego claro».

En la zona mixta comparecieron algunos jugadores del City, mientras que todos los del Arsenal pasaron de largo.

Nicolás Otamendi, central argentino de los ‘citizens’, manifestó que Sergio Agüero, autor del primer gol del encuentro, está siempre «entre los delanteros top del mundo» y que con el tiempo, se sigue manteniendo ahí. «Es un jugador clave en este equipo. Es nuestro goleador y sabes que siempre que tiene una solución cuando le das el balón, además a eso hay que añadirle los goles que marca y que te dan títulos como el de hoy».

El propio Agüero, que adelantó a los suyos con una vaselina que superó a David Ospina en la primera parte, no eludió los elogios y aseguró que está en un temporada «especialmente buena» y que es normal que cuando se hacen las cosas bien «otros equipos se interesan y están mirándote», añadió respecto a la posibilidad de salir del City en el futuro.