La nueva fiscalidad italiana puede provocar una fuga de talento de la Liga

Las cifras quizá no lleguen a tal extremo, pero según un análisis llevado a cabo por Garrigues en colaboración el despacho italiano Simonelli Associati, es cierto que la modificación de la legislación tendrá gran impacto en el fútbol, dado el beneficio fiscal general aplicable sobre las rentas obtenidas en este país a todos los jugadores que adquieran su residencia en Italia a partir de 2020. Mientras que en España un 85% de los futbolistas profesionales podrían tributar un 51% de IRPF (aunque hay diferencias por comunidades, como en el País Vasco), ahora los que no hayan residido en Italia en los dos últimos años y prevean mantener su residencia fiscal en el país podrán acogerse a tributar sólo por el 30% de sus ingresos obtenidos en Italia. En las regiones del sur (Abruzos, Molise, Campania, Apulia, Basilicata, Calabria, Cerdeña y Sicilia), además, el porcentaje del 30% se reduce al 10% y el 90% restante quedaría libre de impuestos. Los incentivos fiscales previstos en el nuevo régimen, exclusivamente para las rentas generadas de fuente italiana, también incluyen una tributación especial por el 10% de las rentas obtenidas en el país transalpino si el residente -es necesario pasar 183 días en un año en el país- si se tienen al menos tres hijos menores.

Es decir, con esta nueva 'Ley Beckham' a la italiana (ya aprobada aunque se rumorea que la Unión Europea pudiera entrar a vetar alguna de esas reformas fiscales), a un jugador que tenga una ficha de un millón de euros brutos sólo se aplicaría el pertinente IRPF a 300.000 euros, mientras que los 700.000 euros restantes irían libres... y si es de los clubes del sur (como Nápoles, Lecce o Cagliari) las cantidades libres de impuestos subirían hasta los 900.000 euros. Esta fórmula se aplicaría durante los cinco primeros años , mientras que los cinco siguientes el porcentaje aumentaría hasta el 50% en la región del norte y en las del sur se mantendría el 10%. Por tanto, un futbolista que firme por un club italiano cinco temporadas este verano con una ficha, por ejemplo, de seis millones de euros netos, le supondría a un club de la Serie A situado en el norte, como la Juventus, vigente campeona de la Serie A, 35 millones de euros, y a uno del sur como el Nápoles, subcampeón, le costaría 32,5 millones. Para que un club de la Liga pueda igualar la citada oferta tendría que invertir 57,5 millones de euros.

Y es que además de tener una capacidad de atracción mayor para los talentos de Europa, los clubes italianos tendrían otras ventajas competitivas extras respecto a los españoles, ya que en Italia hay un proyecto de ley para considerar deducibles para el club el cien por cien de las cantidades pagadas al agente y excluir la tributación en sede del jugador por la retribución adicional. Es decir, que si un agente debe recibir dos millones de euros en un traspaso, el coste total para un club italiano será de 2,3 millones, algo menos que en el Reino Unido, pero casi la mitad que en España: 3,9 millones. «España es el país peor tratado fiscalmente. Hagamos políticas competitivas. Hacemos un producto que exportamos a través de un satélite que suponen unos 1.300 millones y nos cuesta unos 30 millones netos por ejercicio», reclamó Tebas el miércoles.

Además, la Serie A ya tenía un incentivo competitivo respecto al resto con la llamada 'tarifa plana' de 100.000 euros para las rentas generadas fuera del país, como los derechos de imagen, dividendos procedentes de sociedades extranjeras, cánones, ingresos de contratos de patrocinio en el extranjero, rendimientos de inversiones financieras en el extranjero, etc. «Cristiano ya dejó de estar en la 'Ley Beckham', por lo que pagaba el 50% por todo lo que tributa fuera de España, mientras que en Italia debe pagar 100.000 euros, tarifa plana. ¿Qué va a hacer? Si de 100 pago 50 en España y en Italia 20, ¿dónde me voy?», lanzó en su momento Tebas cuando le preguntaron por la marcha de Cristiano Ronaldo a la Juventus. Por el momento, el colombiano Luis Muriel ha sido el primero que ha cambiado este verano la Liga por la Serie A: deja el Sevilla y firma por el Atalanta. Por su parte, James Rodríguez también podría beneficiarse de esta diferencia fiscal, ya que si finalmente ficha por el Nápoles, pasaría de pagar un 45% de impuestos en España al 10% correspondiente a un club del sur de Italia.