Secciones
Servicios
Destacamos
colpisa
Lunes, 17 de febrero 2020, 12:27
El área de Delitos Económicos de la Fiscalía Provincial de Madrid ha interpuesto una tercera querella contra el exfutbolista de la Real Sociedad y el Real Madrid Xabi Alonso, así como contra sus asesores fiscales Iván Zaldúa e Ignacio Maestre. La Fiscalía les imputa ... un delito contra la Hacienda Pública correspondiente al ejercicio fiscal de 2014 por eludir el pago de 840.017,24 euros.
La nueva querella tiene su origen en el informe-denuncia procedente de la Delegación en Madrid de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT) con fecha 13 de diciembre del 2019. Según dicho informe, el 1 de agosto del 2009 Xabi Alonso suscribió un contrato por el que «aparentemente» cedía la explotación de sus derechos de imagen a la sociedad Kardzali, con domicilio en Madeira, entidad que gozaba de exención fiscal en la isla hasta 2012 por cuanto se había constituido en fecha anterior a 2001.
Ignacio Maestre figuró como administrador de la sociedad Kardzali hasta 2014, lo mismo que en otras 23 sociedades en Madeira, mientras que Zaldúa, siempre según la Fiscalía, fue quien planificó la operación denunciada «a sabiendas de que el obligado tributario iba a eludir el pago de los impuestos que debieran repercutirse a los rendimientos derivados de la explotación de la imagen de Xabi Alonso».
Así, el 5 de agosto de 2009 el exjugador de la Real Sociedad firmó un contrato de trabajo con el Real Madrid, momento en que trasladó su residencia a la capital y por lo que en el ejercicio 2014 tenía la condición de residente fiscal en España y su domicilio fiscal en Madrid, «con las obligaciones tributarias correspondientes».
El 1 de agosto del 2014 Alonso, «con el procedimiento de inspección incoado», renovó el contrato de cesión con Kardzali si bien a instancias de Zaldúa fijó un precio de cesión de 2,4 millones de euros, cantidad inferior a la que ya tenía pactada con el Real Madrid y acordó pagos anuales por importe de 480.000 euros, 240.000 en relación con 2014, que resultó consignado por el exfutbolista en su declaración de IRPF como rendimiento de capital mobiliario. A su vez, el 28 de agosto de 2014 formalizó con Kardzali un contrato de suspensión parcial de la cesión de los derechos de imagen en lo que a los derechos colectivos se refiere como consecuencia de su fichaje por el Bayern de Múnich.
«Con ánimo de obtener un beneficio fiscal ilícito, el denunciado presentó en plazo las declaraciones de IRPF del ejercicio 2014 consignado los 240.000 euros pero sin declarar cantidad alguna procedente de los rendimientos obtenidos por la explotación de sus derechos de imagen por cuanto utilizó la estructura societaria de Kardzali y una aparente cesión de los derechos de imagen, operación que como hemos anticipado se diseñó en el año 2009 y continuó en el 2014 por los querellados, con el objeto de hacer fiscalmente opacos los beneficios procedentes de la explotación de los mismos y así ocultarlos a la Hacienda Pública», explica la Fiscalía.
En la querella se subraya que Kardzali ha sido utilizada por Xabi Alonso «como mero instrumento canalizador de los ingresos y pagos sin que la misma haya efectuado gestión alguna en la explotación de los derechos de imagen». El escrito incluso recuerda que Kardzali ha carecido de empleados desde la fecha de la cesión hasta 2012, «momento en que por obligación legal contrata a una tercera persona con una nómina mensual de 70 euros».
Igualmente, a juicio de la Fiscalía, la entidad resultaba «innecesaria» para que el jugador explotara los derechos de imagen por cuanto al momento de suscribir el contrato ya tenía rubricado otro con Adidas. Por tanto, al momento de ceder «aparentemente» la explotación de sus derechos de imagen, Alonso ya tenía garantizados la cuantía de más de 6 millones de euros sin que Kardzali aportara nada a los contratos principales del jugador «salvo la opacidad de los rendimientos a la Agencia Tributaria Española».
De Adidas percibió durante 2014 la cuantía bruta de 319.500 euros y del Real Madrid 1,9 millones. «Como puede desprenderse de estas cifras los ingresos derivados de la explotación de los derechos de imagen ya estaban convenidos cuando se diseñó el contrato de 1 de agosto del 2009 entre el obligado Xabi Alonso y Kardzali», precisa la querella.
Igualmente, según la Fiscalía, Kardzali ha ido transfiriendo desde 2009 un total de 5,9 millones que respondían aparentemente a la deuda de cinco millones contraída por dicha sociedad con Xabi Alonso por la adquisición de los derechos de imagen del mismo, cantidad que se ha ido abonando a medida que la mercantil canalizaba los ingresos generados por la explotación de los derechos de imagen que procedían del Real Madrid como de diferentes marcas publicitarias.
Es decir -insiste la Fiscalía-, Xabi Alonso recibió más dinero del pactado, cantidades procedentes en su totalidad de los contratos que ya tenía suscritos o negociados cuando diseñó el contrato de 1 de agosto de 2009. Por tanto, considera que «dicha cesión nunca fue real y sólo estuvo buscada por los querellados con el propósito de no abonar a la Hacienda Pública los impuestos que debían repercutirse en el año 2014 a los rendimientos que le generó la explotación de la imagen de Xabi Alonso».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.