Fernando Llorente: «Cuando voy a un estadio, me dan ganas de pisar el césped»

Llorente asegura estar feliz con la decisión que ha tomado, aunque no ha sido fácil. «Desde niño estoy haciendo lo mismo, todas las mañanas yendo a entrenar con la misma rutina, y un ritmo de vida que se echa de menos: el vestuario, el convivir con un equipo… Reconozco que me ha costado, hasta que encontré cómo ocupar el tiempo con cosas que me gustan», expone. Ahora mismo, su prioridad es la familia. «No me aburro con tres niños», admite.

En la entrevista el riojano reconoce que ha sido el físico el que le ha llevado a decir basta. «En estos últimos años no estaba rindiendo como antes», cuenta antes de explicar que la decisión la tomó después de quedarse sin equipo tras dejar el Eibar. «Iba pasando el tiempo, y ya llevaba mucho parado», apunta. Al principio, le costó y tuvo opciones de irse a otros puntos del globo terráqueo, pero de nuevo la familia se ha impuesto. «He preferido disfrutar de ellos y no tener que irme solo a jugar a ningún lado», reitera.

Durante la charla en Relevo, Llorente hace un recorrido por toda su carrera. Desde su estreno en enero de 2005 con el Athletic ante el Espanyol («Kameni me paró todas», recuerda) hasta su participación en el citado Mundial de Sudáfrica. «Tengo grabado mi debut frente a Portugal, cuando entro en la segunda parte. Salí a comerme el mundo», rememora al tiempo que cuenta que aún hoy todos los jugadores de aquella selección tienen un chat común donde se felicitan los cumpleaños o cuando logran cosas importantes.

El riojano también recuerda con mal sabor de boca su salida del Athletic. «No me trataron bien, porque no considero que ese sea el trato que se le tiene que dar a un jugador que quieres. Por eso decidí irme», se lamenta. «Cuando usas a los medios para ponerlos en tu contra, e intentar que así renueves por menos dinero, no creo que sea la manera de tratar a un jugador», apostilla.

También recuerda que el Madrid estuvo interesado en él. «No sé hasta qué punto», apuntilla el delantero. «Se hablaba de que quería pagar la cláusula, pero el Athletic por su filosofía se negaba a vender jugadores y puso las cosas difíciles. Luego apareció la 'Juve'», remata.

Sobre el futuro, dice que le gustaría entrenar, pero que ahora mismo necesita tiempo para pensar qué quiere hacer. «Será algo ligado al fútbol, eso seguro», sintetiza para después argumentar que la profesión de entrenador es muy esclava. «Yo por ejemplo tengo claro que quiero disfrutar de mi familia y ser un buen padre, eso para mí es lo más importante y seguramente eso me limita otras cosas», considera.

No echa de menos el fútbol Llorente, al menos por ahora, pero cuando va a un estadio la cosa cambia. «Me dan ganas de pisar el césped», dice. «Hace poco estuve comentando el Fenerbahce-Sevilla, hicimos la previa a pie de campo, y me entraron unas ganas tremendas de vestirme de corto», concluye.