Renato y los botellines

Ya no se salvan ni los italianos. Llega el momento del himno, empieza a correr la cámara por esas caras (o por el pelo de Stephan El Shaarawy) y piensas que cualquier tiempo pasado fue anterior. Vale que no todos son Chiellini pero ya no son los tiempos de Antonioni o Cabrini. O incluso del añorado Pirlo, que todo hay que decirlo, es muy atractivo pero tiene la estructura facial del homo antecessor. Aunque vete a Portugal y échate a Quaresma a la cara. Error, en Portugal hay que echarse a Renato Sanches. Aunque una se sienta como Dalida cuando cantaba aquello de 'Il venait d'avoir 18 ans'.

Que tiene 18 años y es tan indispensable como Cristiano. De padres caboverdianos, creció en un barrio pobre de Lisboa. Jugaba en el Águilas de Musgueira, club gracias al cual los niños salen de las calles. Allí lo descubrió un ojeador del Benfica. El ahora futbolista del Bayern (su representante, claro, es Jorge Mendes) no ha mostrado presión alguna en su primera titularidad con la selección portuguesa. Con actuaciones fantásticas ante Croacia y Polonia. Al pobre la táctica le cuesta trabajo. Fernando Santos utiliza botellines para explicarle lo que quiere que haga. Listo no será pero guapo sí.